
Michael Robinson lleva más de 30 años en España asaltando las casas de los aficionados al fútbol semana tras semana. Su peculiar acento o las enormes virtudes que observa en cualquier equipo de fútbol que no sea el Real Madrid, son algunas de sus señas de distinción. Llegó para intentar salvar "al equipo del Opus Dei", como él define a Osasuna y terminó quedándose gracias a que Alfredo Relaño, entonces jefe de deportes de Canal Plus, decidiera poner un punto exótico a "El día después".
Ahora concede una delirante entrevista al diario de ultra izquierda Público en la que no duda en dar su apoyo al laborista Corbyn, criticar el fútbol actual por capitalista o comparar los mensajes que apoyan al Brexit con las proclamas de Hitler.
"Tendría mucha cara si dijera que yo trabajo"
"El fútbol está secuestrado por el dinero" dice Michael Robinson mientras ingresa por comentar partidos de Liga y Champions, presentar Informe Robinson, Acento Robinson, Caos F.C. o anunciar un método de aprendizaje de inglés entre otras cosas. El ex futbolista habla de "capitalismo desbocado" para referirse a las prácticas económicas de un deporte que ya no reconoce.
A pesar de todos los programas y retransmisiones en las que participa, Robinson se sincera para reconocer que desde que dejó de ser futbolista "he estado esquivando el trabajo". Nacido en Blackpool, admite que el único momento de la semana en el que no bebía por norma era durante las 54 horas previas al partido que debía disputar esa semana. Los terceros tiempos ya eran otra cosa y ahí lo daba todo "poniéndome las botas".
"Siento vergüenza de mi país"
Sus orígenes humildes en la región minera en la que nació le han llevado a sentirse laborista y verse como "una de las pocas personas sobre la faz de la Tierra que piensan que Jeremy Corbyn puede ganar las elecciones". Parece que aún no ha tenido acceso a las últimas encuestas en Reino Unido pero reconoce que en la política actual "faltan ideólogos".
Robinson se muestra desolado por la victoria de Trump en Estados Unidos y anuncia que si en el futuro "se presentan Mickey Mouse y Trump", él apoyará sin fisuras "al primero".
Pero lo que le quita el sueño por completo, es el Brexit. "Siento vergüenza de mi país" reconoce, "la campaña estuvo llena de mentiras" apelando a lo que él denomina "la economía de la verdad" porque para Robinson, "un político inglés no miente".
Y Sin duda, la comparativa más gruesa que hace en toda la entrevista, es la siguiente:
"El voto del Brexit, ha sido un sufragio de arrogancia severa, xenófobo y racista. Y creo que todos estos adjetivos que estoy usando tienen algo que ver con lo que pregonó Hitler."