Gareth Bale está ante su temporada más complicada como jugador del Real Madrid. Tras pasar por el quirófano para operarse el tobillo, reapareció ante el Barcelona y sólo pudo disputar 36 minutos. Este martes ha pasado una serie de pruebas médicas y se ha confirmado que sufre una lesión de grado dos en el sóleo de su pierna izquierda. En concreto, es la sexta lesión en el sóleo izquierdo que sufre Bale desde que aterrizara en el conjunto blanco en verano de 2013.
El galés estará de baja entre tres y cuatro semanas de baja, por lo que esta temporada sólo podría disputar dos partidos. Ante el Málaga en la última jornada de Liga, o en una hipotética final de la Champions en Cardiff, su ciudad natal. Por lo tanto, si se cumplen estos pronósticos, el delantero se perdería los partidos de Liga ante el Deportivo de La Coruña, Valencia, Granada y Sevilla, así como las semifinales de Champions ante el Atlético de Madrid.
Desde que debutara con el Real Madrid, Bale se ha perdido por lesión 57 de los 214 partidos oficiales que ha disputado el club blanco. Es decir, un 26% de los partidos en nueve lesiones en total, seis de ellas en el sóleo izquierdo. Porcentaje que aumentará tras esta última lesión de la que hablaba Zinedine Zidane el pasado sábado en rueda de prensa, en la víspera del Clásico. Según el técnico galo, Bale estaba al "cien por cien" para jugar ante el Barcelona. Luego la realidad se encargó de demostrar que no era así.