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Dybala e Higuaín acercan a la Juventus a la final de Copa de Italia

Remontada de la Vecchia Signora. La Joya hizo un doblete y el Pipita marcó ante su exequipo, pero no lo celebró.

Remontada de la Vecchia Signora. La Joya hizo un doblete y el Pipita marcó ante su exequipo, pero no lo celebró.
Higuaín pelea por un balón con Koulibaly. | EFE

La Juventus de Turín ha remontado ante el Nápoles (3-1) en el Juventus Stadium, en la ida de semifinales de la Copa de Italia, tras sobreponerse a un gol de Callejón gracias a dos penaltis transformados por Paulo Dybala y a un tanto de Gonzalo Higuaín, dejando así la eliminatoria encarrilada para la vuelta y dando un nuevo paso hacia su tercera Copa de Italia consecutiva.

Los de Massimiliano Allegri, campeones de las últimas ediciones de este torneo, necesitaron el descanso y tirar de su pegada para reaccionar al tanto de José Callejón, logrando una ventaja más abultada de lo que el juego demostró.

De esta forma, el rival del Real Madrid en los octavos de final de la Liga de Campeones se complica la vida con otra eliminatoria más en la que jugará la vuelta un resultado de 3-1 en contra, al igual que en la máxima competición continental.

El Nápoles aguantó bien las primeras embestidas de una Juve más activa en ataque, que creó peligro especialmente a través de Higuaín durante la primera media hora de partido. Sin embargo, fue el equipo visitante quien inauguró el marcador. José Callejón anotó en el minuto 36. El español fue asistido por Insigne y desde el pico del área pequeña remató un balón que botó antes de entrar rozando el larguero.

La Vecchia Signora reaccionó tras el descanso y empató en el minuto 47. Koulibaly pisó a Dybala dentro del área cuando éste ya había pasado el balón, y el propio delantero argentino se encargó de transformar el penalti. Las fuerzas se equilibraron tras el gol, pero el Pipita Higuaín culminó la remontada pasada la hora de partido. El exfutbolista del Real Madrid aprovechó una mala salida de Pepe Reina para marcar a placer desde el lateral derecho de la meta napolitana.

Tan sólo cuatro minutos más tarde, el colegiado se equivocó al señalar penalti de Reina. No había pena máxima, y Dybala lo aprovechó para lograr el segundo gol en su cuenta particular. Un tanto que terminó de minar la moral de los visitantes, que tendrán que hacer un gran partido en su feudo si quieren jugar la final de la Copa contra el vencedor del duelo Lazio-Roma, cuyo partido de ida se disputará este miércoles.

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