Combate nulo entre Celta y Deportivo Alavés en Balaídos (0-0), en el primer asalto de semifinales de la Copa del Rey, con lo que será Mendizorroza la que se encargue de dictar sentencia la próxima semana. Este encuentro de ida estuvo marcado por la abundante lluvia caída en Vigo —sobre todo desde los últimos minutos de la primera mitad—, así como por las ocasiones que tuvo el insaciable Iago Aspas, el jugador más peligroso del envite.
Tras una primera parte bastante flojita, que sólo se animó en los últimos minutos con el arreón del Alavés, el partido se animó a la vuelta de vestuarios y fueron los pupilos del Toto Berizzo quienes estuvieron más cerca de conseguir el primer tanto de la eliminatoria. El delantero de Moaña lo intentó de todas las maneras —hasta de chilena— en un carrusel de ocasiones durante la segunda mitad que también encumbraron a Fernando Pacheco, el portero de los babazorros, como uno de los jugadores a tener en cuenta. Para colmo de los locales, si no era el meta alavesista eran los postes. El Tucu Hernández se encontró con la madera cuando se cumplía el minuto 88 y Aspas, a media hora del final, también llevó el cuero al travesaño con un trallazo que hubiera cambiado la cara el encuentro. Una ocasión que llegó provocada tras una sensacional jugada del conjunto olívico, que vistió sus mejores galas pese al temporal.
Lo cierto es que la lluvia se encargó de condicionar un partido histórico para ambos conjuntos —protagonistas en esta semifinal de los humildes— e impidió disfrutar de más ocasiones, sobre todo de los vitorianos, que tuvieron en Deyverson a su jugador referencia. El brasileño realizó un trabajo impagable en labores defensivas y buscó el gol sin recompensa.
Un Alavés que dio una clase maestra de cómo defender y cómo posicionarse en el campo. La misma maestría que le ha llevado a la antesala de la final y a cumplir tan buen papel en el campeonato doméstico. Al buen hacer de Deyverson se sumó el gran comienzo de Camarasa, amenaza constante de los celestes que ya había brillado el pasado fin de semana en el choque liguero contra el Atlético de Madrid en Mendizorroza.
Al final de la primera parte, un centro suyo rematado por Manu García estuvo a punto de convertirse en el 0-1, de igual manera que una jugada de Theo, en el carril zurdo, que despejó Cabral bajo palos cuando los visitantes ya cantaban el gol. Sin embargo, a partir de entonces el partido se tiñó de claro color azul celeste, y fue el Celta quien lo intentó por todos los medios —especialmente con Aspas como protagonista—, mientras que John Guidetti también puso a prueba a Pacheco en un lanzamiento de falta potente pero muy centrado.
Al final el marcador no se movió y será Mendizorroza dentro de una semana quien dicte sentencia y entregue el pase a un nuevo finalista de la Copa del Rey.
Ficha técnica
Celta de Vigo, 0: Sergio; Hugo Mallo, Cabral (Sergi Gómez, m.80), Roncaglia, Jonny; Marcelo Díaz, Radoja; Tucu Hernández, Wass (Guidetti, m.76), Bongonda (Sisto, m.68); y Aspas
CD Alavés, 0: Pacheco; Kiko Femenía, Laguardia, Feddal, Theo; Marcos Llorente, Manu García; Toquero (Édgar, min. 62), Camarasa (Romero, min. 83), Ibai (Vigaray, min. 75); y Deyverson
Árbitro: González González (Comité castellan- leonés). Mostró tarjeta amarilla a Bongonda (m.32), del Celta; y a Marcos Llorente (m.59) y Camarasa (m.67), del Alavés
Incidencias: Partido de ida de semifinales de la Copa del Rey disputado en el estadio de Balaídos ante unos 19.000 espectadores. Noche lluviosa