Muchos le daban por acabado. Otros tantos, hablaban de fracaso. La andadura de Jose Mourinho en el Manchester United no ha tenido un arranque sencillo. El técnico luso, sin embargo, jamás perdió la fe en lo que mejor sabe hacer: trabajar. Y ese trabajo no pasa desapercibido para los que siguen el día a día de los Diablos Rojos.
La directiva del United, a pesar de los malos resultados -son sextos a 13 puntos del Chelsea-, está encantada con Mou y quieren renovar el contrato del luso. Saben que están ante un posible nuevo Ferguson y no quieren dejarlo escapar. Se habla de que quieren ampliar su contrato cinco años más -firmó por tres temporadas-. Así lo aseguran distintos diarios británicos como el The Daily Telegraph, Start o Mirror. Algunos incluso, dejar caer que el United se plantea una renovación por diez años.
¿Por qué a pesar de los malos resultados quieren renovarle?
El estilo de Mourinho ha encandilado a los rectores del United. Sus métodos de trabajo, la manera de gestionar el plantel, de preparar los partidos, como cuida todos los detalles en cada entrenamiento donde exige el máximo a sus jugadores… además la directiva de los Red Devils valoran su tremenda personalidad y carácter.
Lejos de la imagen que proyecta hacia el exterior, en los entrenamientos ven a un Mourinho que ha devuelto el buen ambiente al vestuario. Mourinho se ha ganado a su plantel y con sus actitudes, como la salir en público a dar la cara por el vilipendiado Fellaini, ha conseguido que todos, cuerpo técnico y jugadores, sean una auténtica piña.
Desde la pretemporada, Mourinho se mostró cercano a sus pupilos. Tiene la obsesión de que sus jugadores le vean como uno más. Para ello, ni corto ni perezoso, no le importó dormir en el suelo de un avión cuando el United viajaba a China a disputar dos partidos de pretemporada ante el Borussia Dortmund y el Manchester City.
Mou viajaba en primera clase hacia el país oriental junto a los jugadores del club inglés. Por error, el cuerpo técnico de los 'Diablos Rojos' fue situado en clase turística, para un viaje de muchas horas. Mou abandonó su asiento y acabó durmiendo en el suelo de la parte trasera del avión, algo que despertó la admiración de la plantilla, que se enteró de lo ocurrido pese a viajar en primera clase. Fue un gesto que le hizo terrenal.
Mou no quiere dejar ningún detalle al azar y además de trabajar el aspecto táctico y físico, está especialmente concienciado en cuidar el aspecto psicológico. Algo que siempre fue una seña de identidad de un Mourinho al que sus jugadores en el Oporto y en el Inter idolatraban. Como también sucedió en su primera etapa en el Chelsea. Motivation One ha vuelto para quedarse.