Nuevo susto para Leo Messi. El último ha tenido lugar este lunes a mediodía cuando el avión que trasladaba a la selección argentina desde Buenos Aires a San Juan -sede en la madrugada del martes al miércoles del partido de clasificación para el Mundial de Rusia 2018- se movió más de la cuenta a causa de las turbulencias que afectan la zona de la Región de Cuyo, donde los vientos son frecuentes.
Por ese motivo, al astro barcelonista, cuyo papel con la Albiceleste es cada vez más cuestionado, le bajó la presión y vomitó antes de aterrizar, por lo que tuvo que ser atendido por el cuerpo médico de su selección. Los demás jugadores sufrieron consecuencias similares, en la que varios de ellos se marearon debido a los movimientos del avión, según informa Radio La Red.
"El vuelo se movió un poco, pero es lo normal cuando uno viaja a San Juan", comentaba a la esta emisora Jorge Miadosqui, el directivo que acompañaba a la delegación en el vuelo.