Cristiano Ronaldo fue protagonista el pasado sábado en la victoria del Real Madrid ante el Alavés (1-4). Pero no sólo por sus tres goles, sino porque tuvo que aguantar absolutamente de todo en Mendizorroza. Y es que, según han captado las cámaras del programa Jugones de La Sexta, soportó gestos obscenos, insultos y hasta lanzamiento de varios mecheros desde uno de los fondos del estadio vitoriano.
En el minuto 16, justo antes de lanzar el penalti que supondría el empate a uno, varios aficionados que estaban detrás de la portería de Fernando Pacheco quisieron provocar al madridista con gestos obscenos: uno le le mostró sus genitales y otros dos, el culo.
Después, CR7 recibió varios insultos, entre ellos "hijo de puta", mientras que otro lo mandaba "a la horca". ¡"Balón de Playa, Cristiano Balón de Playa...!", le cantaban otros seguidores al luso, que respondió mostrándoles tres dedos, en referencia a los tres Balones de Oro que ha ganado hasta el momento.
Pero la cosa no quedó ahí, pues a Cristiano le lanzaron varios mecheros. Uno de ellos impactó en una de sus piernas, por lo que el 7 blanco decidió volverse a la grada mientras se llevaba el dedo índice de su mano derecha a la sién.
Las cámaras de La Sexta también captaron cómo, en el minuto 87, después del 1-4 de Cristiano, un aficionado madridista vestido con la camiseta del delantero portugués fue increpado por celebrar el tanto. Los miembros de seguridad de Mendizorroza le pidieron que abandonara la grada y, cuando se marchaba, un seguidor del Alavés le agredió golpeándole en la nuca.