La plantilla del Barcelona se reunió este jueves en un conocido restaurante de Castelldefels para celebrar la goleada al Manchester City en la Champions (4-0) y la segunda Bota de Oro otorgada a Luis Suárez por su condición de máximo goleador de las ligas europeas. Según informa Mundo Deportivo, jugadores, miembros del cuerpo técnico y empleados del primer equipo azulgrana acudieron al Casanova Beach Club junto a sus parejas, aunque hubo dos ausencias notables: la del lesionado Gerard Piqué y la de un Aleix Vidal al que Luis Enrique ha decidido relegar al más puro ostracismo, dejándole fuera de las convocatorias día sí, día también.
La ausencia del lateral catalán fue la comidilla del encuentro entre los profesionales del Barça, mientras que el recién renovado Neymar se incorporó al grupo más tarde al tener que atender unos compromisos publicitarios.
La velada, que se desarrolló en un tono distendido, comenzó con un pequeño incidente de tráfico: Samuel Umtiti tuvo un pequeño choque con otro vehículo cuando se dirigía a la cena, y con ayuda de uno de los responsables de seguridad del club, realizó el parte amistoso del seguro para no llegar tarde a la celebración.