Es una renovación extraña la que ha tenido lugar entre Simeone y el Atlético de Madrid. No es muy habitual, por no decir casi insólito, que un jugador o entrenador renueve con su equipo recibiendo una subida de salario mientras que por el contrario la duración de su contrato se reduzca. Eso ha pasado con el Cholo.
En el programa El Transistor de Onda Cero, Enrique Cerezo, presidente del Atlético de Madrid, confirmó que Simeone había sido renovado con la curiosa condición de que su contrato hasta 2020 bajase hasta 2019.
"Sí se ha reducido el contrato, pero no le deis más vueltas. Simeone es el entrenador del Atlético de Madrid y lo será durante muchos más años. Lo puedo asegurar a título personal, no sólo como Presidente", dijo Cerezo en la previa del partido ante el PSV.
Cerezo fue cuestionado rápidamente por la razón de esa reducción en el contrato de Simeone y el presidente rojiblanco no supo cómo aclarar esa nueva situación contractual: "Sabéis que cuando se negocian este tipo de contratos, unos piden una cosa, otros otra…".
Las palabras de Cerezo dejan una sensación de intranquilidad en la afición rojiblanca que no olvida situaciones como las vividas con el Kun Agüero o Fernando Torres cuando se les rebajó la cláusula provocando que acabaran saliendo del club. En el Atlético mantienen que Simeone está muy a gusto en la entidad y que estará muchos años en el club, como mínimo, hasta 2019.
Mucho se ha hablado de que la bajada del contrato era de dos años, de 2020 hasta 2018, lo que provocaría que Simeone estuviese en la temporada del estreno del nuevo estadio para después marcharse. Con la noticia de que la bajada es sólo hasta 2019, el Cholo se mantendría como rojiblanco la temporada del debut en la Peineta y también en la siguiente.
La decisión de Simeone se debería a la intención del entrenador argentino de decidir él personalmente su futuro sin estar anclado contractualmente a una compensación económica por salir del club. El Cholo es feliz en el Atlético, pero entiende que si en algún momento la nave no tiene la estabilidad que ostenta ahora, el club podría exigirle continuar pese a que él viese terminada su etapa como jefe de la misma. La conclusión es que Simeone quiere ser el dueño de su futuro sin depender de cláusulas de retención.