Bastante agitadas han resultado las últimas horas del mercado de fichajes en la Premier League inglesa, que este año ha tirado la casa por la ventana con un total de 1.150 millones de libras (1.353,5 millones de euros).
Un día antes del Deadline Transfer Day, el último día del mercado, la Premier ya había superado por primera vez en su historia la psicológica barrera de los 1.000 millones de libras invertidos. Sin embargo, el miércoles, los clubes más rezagados se apresuraron e hicieron los deberes y, a las 0:00 horas (23:00 en España), cuando se cerró el mercado, el gasto total se había incrementado en 150 millones de libras.
Y es que el nuevo contrato de derechos de televisión, firmado en febrero de 2015, ha permitido a los clubes ingleses ser los más activos del fútbol europeo y superar con creces los 901 millones de libras (1.057 millones de euros) que se gastaron en el verano de 2015. El contrato de derechos de TV de la categoría reina del fútbol inglés ha pasado de los 3.542 millones de euros del curso pasado a los 6.027 millones durante la presente campaña y las dos próximas.
Los dos clubes de Manchester, el City de Pep Guardiola y el United de José Mourinho, no han registrado incorporaciones en el último día, pero este verano han realizado grandes dispendios para tratar de volver a reinar en Inglaterra. Así, los skyblues han fichado a jugadores como Claudio Bravo, Gündogan, John Stones, Nolito, Leroy Sané o Gabriel Jesús (a partir de enero), entre otros, mientras que los Red Devils se gastaron nada menos que 105 millones de euros en recuperar Paul Pogba, un futbolista al que hace cuatro años traspasaron a la Juventus por un millón de euros. Junto al mediocentro francés llegan a Old Trafford futbolistas como Zlatan Ibrahimovic (gratis), Henrik Mkhitaryan o Eric Bailly.
El Chelsea también ha tirado de chequera (un total de 141,3 millones de euros) para tratar de darle a Antonio Conte una plantilla de garantías. Tras las llegadas de N'Golo Kanté, Michy Batshuayi y Eduardo, los blues cerraron su plantilla en un último día de mercado de infarto con dos fichajes más, y además por cantidades considerables: Marcos Alonso, por 25 millones de euros, y David Luiz, por 40 millones. El central brasileño es el hijo pródigo, pues vuelve a Stamford Bridge dos años después de su marcha al París Saint-Germain.
El equitativo reparto de los derechos televisivos ha permitido a clubes tradicionalmente más modestos, como Crystal Palace, Leicester City o West Ham, poder competir con los teóricos grandes por futbolistas de relumbrón. Así, el campeón de la Premier (Leicester) ganará 176 millones de euros, mientras que el último clasificado recibirá 99 millones (116,1 millones de euros). Nada menos que 13 conjuntos de máxima división han roto durante este mercado de traspasos veraniego su récord histórico pagado por un jugador.
El Crystal Palace, que la pasada campaña peleó por eludir el descenso, se hizo con el codiciado delantero belga Christian Benteke, ex del Liverpool, por nada menos que 32 millones de libras, y el West Ham, que afronta una temporada histórica con la mudanza al Estadio Olímpico de Londres, pagó 20,5 millones por el ghanés André Ayew. A este club del este de la capital británica llega Álvaro Arbeloa, y lo hace gratis después de que el pasado 30 de junio finalizara su contrato con el Real Madrid, en el que ha permanecido las últimas siete temporadas.
El Leicester rompió su récord en dos ocasiones: primero con el extremo nigeriano Ahmed Musa, adquirido por 16 millones de libras del CSKA de Moscú, y más tarde, en el último día de mercado, con el punta argelino Islam Slimani, que llegó por 29 millones del Sporting de Lisboa.
Al Tottenham llegaban dos refuerzos en las últimas horas al hacerse primero con la cesión del portero catalán Pau López, procedente del Espanyol, y casi sobre la bocina con el fichaje del centrocampista francés Mousa Sissoko, que en su día sonó como posible refuerzo del Real Madrid y que también era pretendido por el Everton. Después de haberse quedado sin Sissoko, que hace menos de dos meses brilló con Francia en la final de la pasada Eurocopa contra Portugal, los toffees conseguían a última hora la cesión del ecuatoriano Enner Valencia.
Otros dos protagonistas del Deadline Transfer Day son Jack Wilshere y Mario Balotelli. El internacional inglés abandona el Arsenal y se marcha al Bournemouth, un recién ascendido a la Premier, en calidad de cedido, mientras que el polémico delantero italiano se va del Liverpool -no contaba para el técnico Jürgen Klopp y, de hecho, la pasada campaña jugó cedido en el AC Milan- y se marcha gratis al Niza, de la Ligue 1 francesa.