El entrenador del Sevilla, el argentino Jorge Sampaoli, ha dicho hoy que mañana, en la vuelta de la Supercopa ante el Barcelona, alberga "la idea de modificar algunas cosas" debido a "la intensidad" de la ida y a "la cita ante el Espanyol" con la que su equipo abrirá el sábado la Liga.
Tras perder 0-2 frente al Barcelona el domingo, Sampaoli da prácticamente por perdida la Supercopa, por lo que su prioridad es "llegar con jugadores frescos para el día sábado", ya que alinear a futbolistas "que no están bien sería un problema para el funcionamiento del equipo".
En una rueda de prensa, el exseleccionador chileno ha señalado que aunque "el rival es complicado" y pese a "los inconvenientes" en forma de lesiones, el Sevilla puede "darle la vuelta a la serie siendo competitivos y teniendo una buena tarde", siempre sin olvidar que se trata del Barcelona, "uno de los mejores equipos del mundo".
Jorge Sampaoli se ha felicitado de que en ocho partidos hasta ahora, su equipo ha "ganado seis, empatado uno y perdido otro" -aunque en realidad han sido dos derrotas-, resultados que demuestran que "ha habido avances, aunque hay que mejorar", pero ha presumido de haber igualado en posesión al Barcelona.
El técnico sevillista ha opinado que "sólo el tiempo dirá si la idea de juego es la correcta" y ha insistido en que su pretensión "es plasmar lo que uno siente" porque "hacer lo contrario es fingir" y a él le gustaría que lo recordaran "por cómo se ganó, no por ganar".
"Es mi esencia. Tenemos que seguir por ese camino. Cambiar por un resultado sería un error", ha asegurado.
Sampaoli ha lamentado, por último, las muchas bajas en defensa, por lo que deberá "inventar jugadores que no hay" aunque ello no le va a "quitar la ilusión ante el mejor equipo del mundo" y ha anunciado que será "el momento de Diego González", futbolista del filial que será titular en el Camp Nou.