Ya no habrá más opciones. Sólo queda una bala y el que mejor la aproveche levantará el título liguero del curso 2015/2016. Barcelona o Real Madrid, ya no quedan más candidatos para llevarse una Liga que puede ser recordada como una de las más épicas del conjunto blanco y por consiguiente una debacle catalana o al contrario, una resistencia azulgrana ante el acoso de los rivales.
Hace unos meses ni siquiera se barajaba la posibilidad de que el Real Madrid pelease la Liga ya que estaba por detrás del Atlético de Madrid, por aquel entonces segundo, y muy lejos del Barcelona, que pudo sentenciar al equipo de Zidane en el Clásico. En ese partido en el Camp Nou todo cambió con una victoria madridista por 1-2. Ahí la Liga revivió y el Barcelona acabó perdiendo más puntos de los que nadie esperaba.
De una posible ventaja de 13 puntos en caso de ganar se pasó a una de siete puntos para el Barça. Pese a no poder rematar la Liga, el equipo de Luis Enrique aún mantenía una buena renta de cara a retener el primer puesto, pero volvió a fallar. Perdió en Anoeta contra la Real Sociedad y posteriormente repitió derrota ante el Valencia en el Camp Nou. Seis puntos más recortados por el Madrid y duelo en un sólo punto.
El Atlético de Madrid era lo único que se interponía entre Barcelona y Real Madrid en su particular batalla por la Liga, pero el conjunto de Simeone recayó en la maldición del Ciudad de Valencia y ha dejado a sus dos máximos rivales solos ante el peligro. Todo se decidirá en la última jornada.
Granada-Barcelona (sábado 17:00 horas)
La ciudad de la Alhambra será el último bastión que tendrá que superar el vigente campeón para sumar dos ligas de forma consecutiva. El equipo de José González ya está salvado y no tiene nada en juego, algo que ha despertado muchas suspicacias acerca de sus motivaciones para ganar.
Independientemente de factores internos o externos, el Barcelona parece condenado a tener que ganar para ser campeón. Un empate le podría dar el título siempre y cuando el Real Madrid no gane en Riazor, pero en la Ciudad Condal nadie cuenta con un tropiezo del los hombres de Zidane. El goalaverage lo tienen ganando aunque sólo les valdría en caso de derrota en Granada y empate blanco en territorio gallego.
Deportivo-Real Madrid (sábado 17:00 horas)
El conjunto blanco llegará a Riazor como favorito a llevarse la victoria, pero no el título. Son segundos, a un sólo punto del Barcelona y en su caso la única combinación posible es ganar y esperar que no lo haga el Barcelona. Cualquier otra ecuación le dejaría como segundo al tener perdido el goalaverage.
Su rival, el Deportivo, ya está salvado y el único objetivo que tiene por delante es superar rivales en la tabla y quedar lo más alto posible. La última vez que recibieron a un grande en su campo acabaron perdiendo por 0-8 (Barcelona) pese a jugarse aún la permanencia.
Zidane y los suyos son conscientes de la necesidad de ganar y esperar el error barcelonista y ese será su objetivo. Acumulan once partidos consecutivos con victoria en la Liga y tienen menos que perder ante un Barcelona que hincaría la rodilla en Liga tras poseer una ventaja de diez puntos que pudo ampliar a trece en el Clásico. La liga en juego en dos ciudades. Norte y Sur: La Coruña y Granada.