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Saúl Ñíguez: "En el Real Madrid me robaban las botas y la comida"

El futbolista del Atlético repasa su paso por las categorías inferiores del Real Madrid cuando tenía 11 años.

Saúl Ñíguez celebra un gol con el Atlético de Madrid. | Archivo

Saúl Ñíguez vivió una experiencia que le hizo madurar cuando fichó por el Real Madrid a los 11 años. En una entrevista que el diario El Mundo publica este viernes, en la víspera del derbi madrileño del Santiago Bernabéu, el joven jugador del Atlético ha repasado su paso por el club de Chamartín, en el que, a pesar de todo lo vivido, no le duele recordarlo por la gran experiencia vivida.

"Pasaron cosas extradeportivas. Lo deportivo iba bien, pero bueno, fueron esas cosas extradeportivas, que no podía vivirlas un chico de 11-12 años. Me robaban las botas, la comida... me pusieron un castigo de no poder pisar Valdebebas durante dos semanas por cosas que yo no había hecho... Le pasaron una carta al entrenador diciendo que era yo quien la había escrito. Yo dije que no había sido porque realmente no había sido yo", comenta el jugador en la entrevista al periódico madrileño.

Saúl decidió dejar el Real Madrid y marcharse al Atlético. "Desde pequeñito tenía mucha confianza en mí, y por ejemplo cuando me fui del Madrid sabía que no se acababa el mundo, que yo iba a jugar donde fuera. Yo sólo quería disfrutar".

"Tengo claras mis ideas, tengo una familia que siempre me apoya, me corrige, incluso antes de que pasen las cosas me previenen para no cometer errores", apunta.

Sobre el juego del Atlético de Madrid, Saúl dice que "es verdad que no jugamos como el Barça, que juega bonito y tal, aunque mire, hay gente que dice que hasta el Barça aburre. Juegues como juegues te van a decir algo. Nosotros hacemos siempre lo que pensamos que es mejor para ganar el partido. Es que lo importante es ganar. Tú puedes jugar muy bien, hacer un partido muy bonito, pierdes 1-0 y te quedas con una cara de tonto que dices: '¿de qué me sirve?'. Aquí lo importante es ganar. Es la hostia jugar bonito y ganar, pero lo importante es ganar, da igual cómo. ¿Y lo bonito que es cuando sufres y ganas 1-0? Cuando ganas 5-0 sí, hemos ganado muy fácil, muy bonito, pero tú aprendes a ganar sufriendo, a pelear por cosas duras, y verás… Aquí lo bonito es ganar, da igual cómo juegues".

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