Augusto Fernández está muy cerca de convertirse en nuevo jugador del Atlético de Madrid para las tres próximas temporadas y media -hasta el 30 de junio de 2019-, pero antes debe resolverse su salida del Celta de Vigo.
La idea del club rojiblanco es presentar al centrocampista argentino, de 29 años, el próximo 4 de enero, que es cuando se abre el mercado de invierno, aunque el Celta no facilitará su salida. No al menos hasta que el técnico Eduardo Berizzo encuentre un recambio para el Negro, que llegó a Balaídos en agosto de 2012 procedente del Vélez Sarsfield, club que tiene el 50% restante de los derechos económicos de su traspaso.
El propio Berizzo ha dejado en manos del propio Augusto la decisión de que juegue o no este miércoles ante el Athletic de Bilbao (20:30 horas), en lo que a buen seguro será su último partido con la camiseta celeste y, además, en Balaídos.
"Augusto es uno más. Salvo decisión personal contraria es parte de nosotros y así lo será. Si tiene intención y voluntad de jugar, jugará. Mañana entrenaremos y resolveremos la situación", ha dicho el Toto Berizzo, aclarando que respetará la decisión del futbolista.
"Si cree que no debe jugar este partido porque ha cerrado su traspaso, no lo hará. Augusto siempre se ha comportado muy bien, siempre ha sido profesional y pasional. Si cree que su posición es ésa, lo entenderé y no jugará. Si me manifiesta su voluntad de no participar no lo hará", agregaba el técnico celeste en rueda de prensa.
Berizzo, además, ha dejado entrever que la salida de Augusto será "inminente" y que su sustituto, en lo que sería el primer fichaje invernal para el Celta, será extranjero. "Es más fácil encontrar en el extranjero que en mercado nacional o en Europa. No es fácil encontrar su sustituto porque Augusto tiene un peso específico en el equipo y este es un mercado muy complicado. Hay situaciones más o menos avanzadas. Si sucede lo de Augusto, podría ser inminente", apuntaba un Berizzo resignado a la salida de uno de los mejores futbolistas de su plantilla.
Augusto, que llegó al Celta en agosto de 2012 procedente del Vélez Sarsfield a cambio de 1,6 millones de euros, es un habilidoso centrocampista que suele jugar como mediocentro defensivo o interior derecho. En 121 partidos con la camiseta celeste ha marcado diez goles y ha dado 12 asistencias.
Se trata sin duda de un gran fichaje para el Atlético de Madrid, adonde también llegará este mercado de invierno una de las grandes joyas del fútbol argentino como es el centrocampista Matías Kranevitter, procedente del River Plate.