Aún no se conocen a nivel de números qué medidas se tomarán para mantener la seguridad en el Clásico del Santiago Bernabéu entre Real Madrid y Barcelona, pero el aumento de efectivos y de medidas será más que evidente, según confirmaba la delegada de Gobierno en Madrid, Concepción Dancausa.
"Se hará lo mismo de siempre, el protocolo habitual, pero se aumentará la vigilancia y el control será mayor. La entrada y salida de los aficionados será vigilada de forma mas exhaustiva", comentó Dancausa.
El jueves se producirá una reunión entre todas las partes implicadas para diseñar de manera definitiva el plan a seguir durante la jornada del sábado. La Delegación del Gobierno, el Real Madrid, el Barcelona, los servicios municipales de la capital de España y la Policía decidirán finalmente el número de efectivos a utilizar y las medidas de seguridad que tomarán.
La revisión de mochilas a la entrada será muy intensa "mirando con lupa incluso los bocadillos". En el Vicente Calderón ya se introdujeron bengalas con este camuflaje y los seguidores del Benfica las arrojaron al campo durante la disputa del encuentro.
Habrá perros adiestrados buscando explosivos, se revisarán las alcantarillas, existirá un cordón de seguridad con tres pasos previos a la entrada al estadio… No se quiere dejar ni un sólo cabo suelto de cara a este Clásico.
En Madrid ya existe un precedente parecido aunque de menor importancia a nivel futbolístico ya que, tras el 11-M en 2004, dos días después se disputó un Real Madrid-Zaragoza en el Santiago Bernabéu.