Gerard Piqué tomó la palabra por primera vez después de su expulsión en la vuelta de la Supercopa de España en el Camp Nou ante el Athletic. El central del Barcelona, sancionado con cuatro partidos, espera que sea finalmente una sanción menor.
"Soy optimista y espero que se reduzca la sanción, porque es difícil no poder ayudar al equipo", comentó Piqué en un acto para Poker Stars.
El número 3 del Barcelona también habló de la lucha por la Liga y defendió a los colegiados: "Que el Barcelona gane la Liga o no, no dependerá de los arbitrajes. Los colegiados son 100 por 100 imparciales. Hemos ganados cinco de las últimas siete ligas y vamos a por la octava".
Piqué tampoco cree que el equipo esté justo de efectivos: "Hay equipo. A pesar de las bajas, el equipo ha ido a un campo difícil y ha sacado la victoria. Decir que no hay fondo de armario es buscar lo negativo. No se acaba el mundo por perder un partido".