Si estuviéramos hablando de cualquiera de las campañas disputadas antes en el fútbol español, habría un equipo que ya tendría una alegría en el cuerpo. El Athletic de Bilbao estaría saboreando desde el 4 de marzo, fecha en la que consiguió su pase a la final de Copa, el hecho de estar ya clasificado a la Europa League. Como mínimo va a ser subcampeón de Copa y ese honor conllevaba jugar en Europa el año siguiente si el rival en la final (el Barça este año) se clasificaba a Liga de Campeones algo que, obviamente, los de Luis Enrique van a conseguir.
Pero la normativa ha cambiado y a partir de este año el que tiene premio si sucede esa combinación es el séptimo en Liga. Ahora mismo el Málaga tiene un colchón de puntos que le permiten asegurar que si sigue en esa posición al final de Liga conseguirá premio extra la temporada que viene.
Pero la alegría para el fútbol español se puede alargar si uno de los dos contendientes en Europa League, ahora Villarreal y Sevilla, consiguen el título el próximo 27 de mayo en Varsovia. Desgraciadamente a partir de este jueves sólo uno seguirá el camino porque ese duelo fratricida tendrá un solo ganador, probablemente el Sevilla dado el partido de ida. Si los de Emery ganan la Europa League tendrán una plaza en Champions (normativa nueva este año) y entonces el octavo irá también a Europa.
Habría entonces cinco plazas de Champions y tres de Europa League. La UEFA no permite más de tres plazas en la segunda competición europea, pero sí que se ha amoldado a tener cinco si llega el caso, en la gran competición, la Champions. La normativa de permitir el acceso a la élite, al campeón de la Europa League, algo que perseguía Platini desde 2007 y aprobado en 2012. permitirá la opción de que un país tenga algún año cinco plazas en Liga de Campeones.
En el año 2000 España pudo tener cinco participantes en la máxima competición, pero la UEFA lo impedía. El Real Madrid ganó la Champions en Paris y quedó séptimo en Liga. Barcelona, Deportivo y Valencia ocuparon las plazas por derecho y los blancos la cuarta, que dejaron al Zaragoza, cuarto en Liga ese año, sin el premio.
A Inglaterra le pasó lo mismo en 2005. El Liverpool no había alcanzado las posiciones nobles pero la normativa había cambiado. Chelsea, Manchester United, Arsenal y Everton pasaron por derecho propio y los reds como campeones de Europa. En la ronda previa el Everton fue eliminado por el Villarreal y algunos dicen que les evitaron a la UEFA un quebradero de cabeza. Al final en el torneo decisivo sólo hubo cuatro ingleses.
Por supuesto hay que contar con la posibilidad de que nada de esto suceda. Que la Copa la gane el Athletic, que iría entonces directo a Europa League como campeón del torneo del K.O. y que un español no gane la segunda competición europea. En ese caso, como siempre, cuatro a Champions, dos a Europa League por la Liga y el campeón de Copa.
El espacio que se ha abierto entre el séptimo y el octavo en Liga y el que hay ahora entre sexto y séptimo permitirá que con estas opciones todo sea emocionante hasta final de año. Las plazas Champions, la sexta, la séptima y la posibilidad de la octava. Sin contar, por supuesto, con el descenso. Marzo ya empieza a dar sentido completo a un año tan largo.