El regreso de Luka Modric estaba previsto para el partido de vuelta de octavos de final de la Champions League ante el Schalke 04, pero su regreso podría producirse este mismo fin de semana ante el Atheltic de Bilbao. La idea era que se "estrenara" ante el equipo alemán. Un partido cómodo, con el 0 a 2 de la ida y con varios jugadores necesitados de un descanso como es el caso de Kroos, con 39 partidos disputados y casi 3400 minutos en las botas.
El centrocampista entrenó con el grupo por primera vez desde su lesión el pasado 19 de febrero. Desde entonces, no se ha perdido ningún entrenamiento. El 28 de febrero pasó su última revisión y los resultados fueron positivos. Ante el Athletic de Bilbao no saldrá de inicio. Será un partido intenso pero si tiene muchas posibilidades para entrar en la convocatoria y viajar con el equipo.
Modric quiere jugar y Ancelotti duda. Esta semana y los cuatro entrenamientos que tiene por delante, serán claves en la decisión. El último partido ante el Villareal también pesa. El Real Madrid volvió a perder por momentos el control del centro del campo. Illarramendi no cuenta con la confianza necesaria, Lucas Silva está todavía en un proceso de adaptación y ninguno de los dos puede suplir con el mismo nivel a Modric.
Lo que no ha sido modificado es el objetivo final. La intención del Real Madrid es que Luka Modric este en plenas condiciones para jugar de inicio el próximo 22 de marzo en el Camp Nou ante el Fútbol Club Barcelona.