El secretario de Estado de Seguridad, Francisco Martínez Vázquez, ha anunciado este martes que el Ministerio del Interior ha cesado a los responsables policiales de seguridad del Atlético de Madrid y el Deportivo de La Coruña por los violentos incidentes acaecidos el pasado 30 de noviembre y que acabaron con la muerte de un ultra del equipo gallego.
Durante su comparecencia en la comisión conjunta de Interior y Deportes que se está celebrando en el Congreso de los Diputados, ha justificado estos ceses como parte de la "corresponsabilidad" que debe asumir su departamento, aunque ha remarcado que "los responsables son las personas que participaron en la riña multitudinaria". "Los dos grupos ultras querían pelearse", ha añadido.
Martínez Vázquez ha señalado al Deportivo de La Coruña como responsable de la falta de información que no permitió valorar de forma adecuada los posibles riesgos que podía tener ese partido de fútbol. "El Deportivo no trasmitió al coordinador de seguridad toda la información sobre el viaje de los Riazor Blues. La Federación de Peñas les entregó 110 entradas, en un paquete de 60 y otro de 50 y no lo avisaron", ha resaltado.
Ha explicado que no se llegó a debatir sobre la posibilidad de calificar el partido de alto riesgo porque hasta el día de los hechos "no había habido enfrentamientos entre ultras de ambos equipos" y las informaciones que manejaban eran que los Riazor Blues habían conseguido comprar sólo diez entradas y como mucho iban a viajar la misma mañana del domingo unos 50 radicales coruñeses.
El número dos del Ministerio del Interior ha dicho que el dispositivo del partido fue el habitual para encuentros que no son de alto riesgo y ha detallado que estuvo compuesto por un centenar de agentes del Cuerpo Nacional de Policía (entre los que estaban los grupos 30, 40 y 80 de las UIP) y otros 60 efectivos de la Policía Municipal.
Por último, ha explicado que en la temporada deportiva pasada se evaluaron un total de 2.969 encuentros, de los que menos del dos por ciento fueron calificados como de alto riesgo, al tiempo que ha avanzado que se está trabajando en elaborar un nuevo documento tipo para que los responsables policiales de seguridad de cada equipo remitan antes de los partidos a los organismos de control pertinente.
En la comisión también ha comparecido el secretario de Estado de Deportes y presidente del Consejo Superior de Deportes (CSD), Miguel Cardenal, quien ha anunciado la creación de un manual, que será entregado a las aficiones visitantes pero que no ha dejado claro si también a las locales, en las que se especificarán las expresiones o cánticos que serán sancionables dentro de las instalaciones deportivas.
En esta línea, también ha adelantado que las modificaciones en la reglamentación deportiva que incluye aspectos como la pérdida de puntos e, incluso, la pérdida de la categoría, y en las que están trabajando tanto el CSD como la Liga de Fútbol Profesional (LFP) y la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), estarán concluidas antes del próximo 15 de diciembre.
Cardenal ha defendido en todo momento que se puede acudir a los espectáculos deportivos con seguridad. "En España es seguro ir al fútbol, porque está demostrada la escasa relación de incidentes violentos. Después de lo ocurrido con la muerte del seguidor del Deportivo, los clubes han actuado con rapidez, con la expulsión del Frente Atlético y la prohibición de entrada a los Riazor Blues en Riazor"