Diego Simeone piensa únicamente en el grupo y nadie le va a hacer cambiar de opinión. Da igual que paguen 16 millones por un futbolista referencia en Italia. El Cholo antepondrá el beneficio del Atlético al de cualquier jugador como se ha podido comprobar en el caso Cerci. Para Simeone no hay ningún misterio sobre este asunto. No juega porque entiende que otros aportan más que el atacante italiano y ante el Málaga, Alessio Cerci no fue protagonista en ninguno de los tres cambios que introdujo el técnico argentino en la segunda parte.
Muchos pensaron tras las palabras de Cerci que Simeone le daría minutos en mayor o menor medida en el último choque disputado en el Vicente Calderón. De hecho, el número 11 del Atlético de Madrid calentó durante veinte minutos aunque fue en vano. Raúl Jiménez entró por Mario Mandzukic, lesionado, Saúl por Griezmann para contener más en el centro del campo y Raúl García fue el recambio de Arda Turan. Ni rastro de Cerci, que también pensaba que contaría con una nueva oportunidad.
La respuesta del ex del Torino ante esa nueva suplencia ha sido la adecuada. En las últimas sesiones de entrenamiento se le ha visto muy implicado y con el objetivo claro de hacerse un hueco en las rotaciones del Cholo. Incluso Godín, tercer capitán del Atlético de Madrid, ha reconocido que han hablado con él: "Habló el míster y hablamos grupalmente porque todos tenemos la misma línea de trabajo y lo importante es el equipo. Cerci, como cualquier jugador, lo que quiere es jugar, pero para poder hacerlo debe trabajar en cada entrenamiento y si juegas cinco, diez o quince minutos hay que darlo todo".
Por el momento, la idea del Atlético de Madrid y de Simeone es que Cerci vaya contando con más oportunidades según avance la temporada y a día de hoy, no es una opción su salida en el mercado invernal pese al interés de varios equipos importantes en Europa.
Los número de Cerci hasta la fecha siguen siendo escasos ya que sólo ha marcado un gol en Champions ante el Malmoe, fue expulsado en Mestalla y apenas ha tenido influencia en los escasos seis encuentros que ha disputado. Aún así, el cuerpo técnico sigue confiando plenamente en el futbolista transalpino. En los últimos días también se ha valorado su peso ya que se habla de un exceso de a su llegada al Calderón. Su peso ideal es de 80 kilos y habría llegado con 84.