A seis puntos del Chelsea en la Premier League inglesa y casi eliminado de la Liga de Campeones. El panorama del Manchester City es desolador a mediados de noviembre. Un equipo que no ha funcionado y con signos evidentes de egos concentrados en un club que desea romper de inmediato con su desgracia.
Sólo una vez estuvo el City en octavos de final de la Champions y fue eliminado por el Barcelona. En sus otras participaciones, el conjunto skyblue cayó en un grupo muy complicado en cada ocasión. Un año, con Bayern, Villarreal y Nápoles; otro, con Real Madrid y Borussia Dortmund. Y este año, con Roma y Bayern de Múnich. Tremendo.
En su partido europeo, el pasado miércoles en el Etihad Stadium ante el CSKA de Moscú (1-2), tuvo además la complicación de dos expulsiones y de un juego muy malo. Manuel Pellegrini no está dando con la tecla de conjuntar un equipazo portentoso que se puede partir en muchos momentos del partido. En la Premier League, en bastantes ocasiones, Fernando se queda como único pivote, Yaya Touré se va hacia arriba para acompañar a los Nasri, Silva, Jovetic, Agüero, Dzeko de turno... Un once inigualable en Europa pero que no ganará la Liga inglesa a este paso y que tropezará de nuevo con la misma piedra en Champions.
El once tipo del equipo es el siguiente Hart; Zabaleta, Kompany, Demichelis, Clichy; Fernando, Yaya Touré; Silva, Nasri, Jovetic; y Agüero. Luego existen las combinaciones de Dzeko por Agüero, Milner por Nasri, Navas por Silva, Fernandinho por Fernando, Mandala por Demichelis, Kolarov por Clichy, Sagna por Zabaleta, Nastasic por Kompany y, en la portería, Willy Caballero por Joe Hart. Un equipo en el que Pellegrini puede manejar dos plantillas eternas. Incluso Lampard, ya mayor, se ha hecho con un pequeño hueco en el equipo y jugará bastante de aquí al final de año tras haber conseguido un contrato prorrogado.
Aún con todo, los citizens no dan la talla en Liga ni en Europa y el jeque Sulaiman Al-Fahim comienza a enfadarse. Pellegrini prometía espectáculo, pero no tanto resultados. El City, un histórico en la ciudad -de hecho, allí hay más aficionados blues que del United-, no funciona y Manchester llora por las desgracias de los citizens, aunque tampoco los vecinos red devils están muy bien. La ciudad no está en su mejor momento y eso que el City es el actual campeón
Aficionados del equipo de Pellegrini pidieron más esfuerzo y más tenacidad en el encuentro ante el CSKA. El grupo se le ha puesto peliagudo, ya que una victoria de la Roma en Moscú obligaría a los citizens a ganar al Bayern y eso ahora mismo es mucho decir.
En la Premier aún queda mucho y el año pasado fueron muy por detrás del Liverpool durante gran parte del año, remontando en un agónico final para ganar la segunda liga en tres años. Pero eso no es suficiente para el jeque Al-Fahim. Un portentoso multimillonario que creía que iba a ser el rey de Europa, aunque para llegar a eso hay que jugar mucho.