Alberto Moreno, lateral izquierdo internacional del Sevilla, lloró amargamente en el césped del estadio de la Ciudad de Cardiff tras perder su equipo ante el Real Madrid en la Supercopa, que no jugó ante su inminente pase al Liverpool.
Alberto Moreno, que en principio iba a ser el titular en la banda izquierda de la defensa, finalmente no formó parte ni del once ni estuvo en el banquillo entre los suplentes.
El zaguero andaluz, al acabar el partido, no pudo evitar las lágrimas en su despedida. Fue abrazado cariñosamente por todos sus compañeros en el césped del estadio de la capital del País de Gales e incluso acudió a la zona donde estaba su afición para despedirse de sus seguidores.
Fue de los últimos en recibir la medalla de subcampeón en el palco de autoridades, al que accedió también entre lágrimas y cabizbajo.