James Rodríguez pudo fichar por el Espanyol por cinco millones de euros

La evolución del colombiano James Rodríguez, nuevo jugador del Real Madrid, es, sin duda, una de las más meteóricas del fútbol moderno. El hasta ahora jugador del Mónaco, que pagara al Oporto 45 millones de euros la pasada temporada, llega al club de la Avenida de Concha Espina por una cifra aproximada de entre 70 y 80 millones de euros, tras su actuación estelar en el Mundial, donde fue el líder de la selección cafetera, y terminó como máximo goleador con seis tantos, incluido el que ha sido reconocido por la FIFA como el mejor gol del torneo, una espectacular volea desde fuera del área en el partido de octavos de final ante Uruguay.

Sin embargo, el sudamericano no ha sido siempre un jugador caro. En el verano de 2010, con apenas 19 años, y militando en las filas del Banfield argentino, el mediapunta estuvo a un paso de convertirse en jugador del Espanyol de Barcelona, en una operación en la que los de la Ciudad Condal llegaron a ofrecer una cantidad cercana a los 5 millones de euros por el de Cúcuta. Pero la intromisión final del Oporto, uno de los grandes del fútbol del viejo continente, hizo que James terminara jugando en el Estadio Do Dragao, tras abonar los lusos 5,1 millones.

En el club del norte de Portugal, Rodríguez militó tres campañas, como paso previo a su fichaje por el millonario Mónaco, y de su llegada esta temporada al club por el que el colombiano siempre ha reconocido sentir admiración, el Real Madrid.

No cabe duda, por tanto, que el club periquito tuvo un fantástico ojo al fijarse en el colombiano, un jugador que, de haber terminado incorporado a la disciplina barcelonesa, habría reportado sin duda mucho dinero a las arcas blanquiazules pocas temporadas después.