![Klose puede convertirse en el máximo goleador de los mundiales El alemán acumula 15 dianas en cuatro Copas del mundo disputadas desde el 2002 y con su último tanto ante Ghana igualó al brasileño Ronaldo.](https://s.libertaddigital.com/images/trans.png)
Miroslav Klose puede convertirse este jueves en el máximo goleador en fases finales de mundiales. El alemán acumula 15 dianas en cuatro Copas del mundo disputadas desde el 2002. Con su último tanto ante Ghana, el que rescató un punto para Alemania, igualó al brasileño Ronaldo Nazário en la lista de artilleros. Ante EEUU puede hacer historia.
Demoledor en el remate de cabeza y notable en la recepción de espaldas, el delantero (1,82 metros y 74 kilos) cuenta con 5 goles en el mundial de 2002, cuando fue subcampeón, con otros 5 en el 2006 -máximo anotador de esa edición, en la que Alemania fue tercera- , con cuatro en el 2010, cerrada con otro tercer puesto, y uno, por el momento, en 2014.
Klose tiene otro récord en el horizonte, que difícilmente será consumado por la edad: igualar los 150 partidos con la selección alemana sumados por Lothar Matthaus. Le restan 17 choques.
Nacido en la pequeña ciudad de Opole, en el sur de Polonia, de un padre futbolista de origen alemán y una madre jugadora de balonmano polaca, el actual ariete de la Lazio italiana marchó a vivir a Alemania con apenas 8 años.
Contratado por el Bayern Múnich, jugó cuatro temporadas en el coloso de Baviera con el que levantó dos Bundesligas (2008 y 2010). En 98 participaciones sumó 23 redes. Retomó la vena goleadora en la Lazio, donde milita desde el 2011 con un relevante saldo de 35 goles en 80 partidos. Con los romanos logró la Copa de Italia en el 2013.
Miroslav Klose también se ha destacado en su carrera por juego limpio. En el 2005, cuando vestía el verde del Bremen, rehusó a aceptar un penalti concedido ante el Arminia Bielefeld por considerar que no lo era.
Recientemente, en septiembre del 2012, Klose, ya como delantero de la Lazio, confesó al árbitro que había marcado con la mano en un choque ante el Nápoles. El colegiado rectificó y decidió no amonestar al alemán por su gesto honesto.