La prensa francesa acusa a España de la corrupción en el Mundial de Qatar

La revista francesa France Football ha publicado un reportaje especial sobre la trama de corrupción que rodea a la elección de Qatar como sede del Mundial de Fútbol de 2022 y ha señalado a España como el epicentro de la trama. La información titula "El Mundial imposible. Una corrupción tentacular. España en el corazón del escándalo".

La publicación desvela un supuesto pacto entre Qatar y España para repartirse apoyos y lograr hacerse con las organizaciones de los mundiales de 2018 y 2022. En ese supuesto intercambio de apoyos, acusan al presidente de la Federación Española de Fútbol (RFEF), Ángel María Villar y al expresidente del FC Barcelona Sandro Rosell como los principales actores de la trama.

Villar consiguió reunir apoyos para Qatar gracias a sus estrechas relaciones con los presidentes de las federaciones sudamericanas, mientras que la relación de Rosell con Ricardo Texeira, presidente de la Confederación Brasileña de Fútbol (CBF) también fue decisiva. La publicación también apunta hacia Carles Vilarrubí, vicepresidente del Barça y consejero de la Banca Rothschild, a la que consideran clave en la consecución del patrocinio de Qatar Foundation sobre el club.

En el caso de Rosell, el semanario publica unos documentos para demostrar que la sociedad BSM, de la que en ese momento era propietario, se benefició de los acuerdos de la academia Aspire para la formación de jóvenes futbolistas con un contrato por valor de 2.754 millones de euros para instalar academias de formación en distintos países.

Las acusaciones apuntan hacia el Real Madrid y Florentino Pérez. France Football asegura que dichas academias están dirigidas por antiguos colaboradores del equipo madrileño y del Barcelona, que estarían unidos para lograr que el Mundial 2022 fuese a parar a Qatar. En el caso del presidente madridista afirma que el dirigente blanco se reunió con Villar -algo que han negado desde el club- para asegurarse el beneficio de empresas como Iberostar, ACS y Hochtief, con intereses en el país.