Hasta el propio entorno de Miguel Cardenal parece sentirse algo contrariado con el artículo que ha escrito el actual presidente del Consejo Superior de Deportes (CSD) (cargo con rango de Secretario de Estado) defendiendo a capa y espada al Fútbol Club Barcelona. Tanto carga las tintas Cardenal en las páginas de El País que llega a decir que se "rebela" contra quienes "acosan" y "acusan" al club catalán, a quien considera un activo fundamental de la "marca España". Consideración, esta última, que choca frontalmente con la actitud del club blaulgrana que emplea tanto su imagen como su estadio para promocionar el proyecto separatista de Artur Mas.
Fuentes cercanas a su entorno se muestran cautelosamente sorprendidos y destacan que la intención del presidente del CSD era más la de defender la liga española frente a la mala imagen que estaba dando el FC Barcelona fuera de España, que la de dar la cara por el club que ahora preside Bartomeu tras la dimisión fulminante de Sandro Rosell por el estallido del caso Neymar.
Pero las circunstancias que rodean a este artículo, y el aldabonazo de Cardenal al Barcelona levantan sospechas. Según ha podido confirmar Libertad Digital, Miguel Cardenal ha mantenido reuniones durante las últimas semanas con el Fútbol Club Barcelona, tanto en la Ciudad Condal como en Madrid. Fuentes del CSD defienden a Cardenal diciendo que el presidente mantiene reuniones periódicas con todos los clubes de fútbol. Además, destacan que sus conversaciones con el FC Barcelona son mayores y más intensas debido a la cantidad de jugadores internacionales que el club mantiene entre todas las secciones deportivas.
Barça y la marca España
Una de las cosas que más destacan del artículo que firma Miguel Cardenal en El País es que atribuye al FC Barcelona ser "un activo fundamental de la marca España". Al hecho de que el Barcelona haya puesto su estadio a disposición del proyecto separatista de Mas, habría que sumar un detalle de la historia reciente. En 2011 el club que con tanto ahínco defiende Cardenal se negaba a ser imagen de España. La negativa se la dio a Miguel Sebastián, cuando este era ministro de Industria y Turismo. Sebastián firmó un acuerdo con la Comunidad de Madrid , el Ayuntamiento y con el presidente del Real Madrid para la promoción de España a través del conjunto blanco. La misma oferta que hizo al Barça y que fue rechazada.
La idea era convertir a los jugadores del FC Barcelona en embajadores de la imagen de España en el exterior. En rueda de prensa, Miguel Sebastián dijo que "la marca Real Madrid es de las más conocidas del mundo" y reveló que para el acuerdo "nos acercamos al Real Madrid como nos acercamos al Barcelona". Sin embargo, continuó, "no hubo forma con el Barcelona, con el equipo directivo anterior", el de Joan Laporta.
Doctor en Derecho e hijo de fiscal
Miguel Cardenal, bilbaíno de 46 años, es doctor en Derecho por Navarra y catedrático de la Universidad de Extremadura, además de director de la Cátedra de Estudios e Investigación en Derecho Deportivo de la Universidad Rey Juan Carlos.
Miguel es hijo de Jesús Cardenal, quien fuera fiscal general del Estado durante el gobierno de José María Aznar. Llega a la presidencia del Consejo Superior de Deportes porque Mariano Rajoy lo decide y su nombramiento se acuerda en el Consejo de Ministros. Con la llegada del PP al Gobierno, los deportes dejan de ser un asunto dependiente directamente de Moncloa y se insertan en el Ministerio de Educación.
Buenas relaciones con Valero Rivera
Una de las cosas que más llaman la atención del artículo que publica Miguel Cardenal en El País es la imagen que el periódico de Prisa emplea para ilustrar la información. Escoge una fotografía en la que aparece, en segundo plano y ligeramente desenfocado Miguel Cardenal. En primer plano, acompaña al presidente del CSD el exentrenador del Barcelona de Balonmano y exseleccionador nacional, Valero Rivera.
Curiosamente, Valero Rivera ha sido uno de los principales defensores de Iñaki Urdangarin, a quien entrenó en la sección de Balonmano del FC Barcelona. Rivera presume de su amistad y ha querido incluso llevarse al yerno del Rey a Qatar, donde ahora continúa su carrera como entrenador de balonmano de la selección qatarí. Es más, tal y como avanzó Libertad Digital, Valero Rivera llegó a pagar a Urdangarín y a la Infanta 53.000 euros por unas charlas que organizaba la empresa "Valero Rivera Asesoramiento Deportivo S.L" en Lanzarote.
Antes como miembro del comité de competición (puesto que ocupa entre 2004 y 2005) y presidente del Consejo Superior de Deportes, Miguel Cardenal se ha reunido en repetidas ocasiones con Valero Rivera. Aunque su relación es fluida, el entorno de Cardenal destaca que ambos mantienen una relación estrictamente profesional.
La defensa del Barça y la sanción a Ronaldo
Cardenal es el encargado de sancionar el puesto de presidente del Tribunal Administrativo del Deporte (antes conocido como "Comité Español de Disciplina Deportiva"), dependiente del Consejo Superior de Deportes. Es más, de los siete miembros de este tribunal, cuatro son elegidos por el propio Consejo Superior de Deportes y los otros tres por las federaciones deportivas.
Curiosamente, la primera decisión que toma este Tribunal es la de sancionar tres partidos a Cristiano Ronaldo, rechazando los recursos del Real Madrid por la tarjeta roja que vio en Bilbao el 2 de febrero. El Tribunal Administrativo del Deporte no tuvo empacho en esperar hasta apenas unas horas antes de que se jugara el tercer partido de sanción -que enfrentaría al Real Madrid con el Elche y para el que Ronaldo estaba convocado, convencido el club de que se aceptaría el recurso y le dejarían jugar- para confirmar la sanción.
Las circunstancias que rodean a la reunión del Tribunal que provocó esta sanción son, al menos, anómalas. Como se ha contado anteriormente, este órgano se estrena con el recurso del Real Madrid para rebajar la sanción a Ronaldo, que fue desestimada.
Hasta el día 21 de febrero, el presidente del Tribunal Administrativo del Deporte 'in pectore' -ya que no se había constituido aún de manera oficial- era Tomás González Cueto, abogado del Estado. Lo fue hasta un día antes de la constitución del Tribunal, cuando, según cuenta El Confidencial, ese día 21 recibió una llamada de la directora general del CSD, Ana Muñoz, para informarle de que no sería el presidente del Tribunal y que en su lugar sería nombrado Enrique Arnaldo Alcubilla. Así, González Cueto -hombre de confianza de Soraya Sáenz de Santamaría- se volvía al gabinete de la vicepresidenta.
Muñoz le informó que el presidente ya no sería él, sino Enrique Arnaldo Alcubilla -candidato de Miguel Cardenal-. El nuevo presidente se estrenó manteniendo la sanción de Ronaldo poco después de tomar posesión por sorpresa como máximo responsable del órgano judicial del deporte español.