El entrenador del Atlético de Madrid, el argentino Diego Pablo Simeone, ha dicho que su equipo no tiene techo" porque "está detrás de una idea", y se mostró satisfecho por haber conseguido formar "un equipo molesto" que obligue a los rivales "a correr el triple y trabajar el doble".
En una entrevista con el diario deportivo Olé, el técnico argentino confesó que le gusta jugar contra el Real Madrid y el Barcelona "porque les vas perdiendo el miedo" y que, si por él fuera, jugaría "tres veces" contra cada uno en pretemporada.
"En la prensa ves diez páginas de uno, diez del otro, ganan 4-0 y parece que fuera 16-0 porque el partido te lo repiten cuatro veces", pero el temor se va cuando juegan directamente porque "nos sentimos cercanos a ellos en el día a día", reconoció.
Sobre los octavos de final de la Liga de Campeones, el Cholo califica de "muy importante" la victoria en San Siro ante el Milan, pero "no es determinante, la revancha será dura", especialmente ante un equipo italiano.
Simeone también tuvo palabras de reconocimiento para sus compatriotas Juan Antonio Pizzi y Gerardo Tata Martino, que fueron "muy criticados" en Argentina pero que "han abierto puertas en España", donde es "muy difícil meterse".
El técnico también hizo balance de su carrera en los banquillos, que comenzó en Racing de Avellaneda en 2006. Entre sus mayores errores recuerda haberse ido de River "faltando poco para no dejarlo último", en vez de "haber apostado a que no saliera último".
Por el contrario, entre sus mejores memorias está la final de la Supercopa de Europa entre Atlético y Chelsea, que calificó como "el mejor" que vivió como entrenador.
Respecto a su hijo Giovanni, delantero en River, Simeone aseguró que trata de "no interferir en su crecimiento como jugador", más allá que decirle que haga goles porque, en su puesto, "vive del gol".
El entrenador rojiblanco reconoció que echa de menos a su familia: "Soy feliz haciendo lo que quiero, pero no tengo a mis hijos, que son lo que cuenta en la vida", aunque "es una elección", dijo. "Nadie me puso una pistola para estar acá".