España se entrena sin Piqué, Arbeloa y Sergio Ramos

La selección española regresó a los entrenamientos en La Ciudad del Fútbol sin los defensas Gerard Piqué, Álvaro Arbeloa y Sergio Ramos, que se ejercitaron en el gimnasio por precaución, y se ausentaron de una sesión en la que Vicente del Bosque no pudo ensayar los cambios para Georgia.

El seleccionador español busca soluciones tácticas y cambio de jugadores para encontrar la fluidez de juego que faltó en Son Moix ante Bielorrusia, porque el martes espera en Albacete un planteamiento defensivo similar de Georgia. En el primer entrenamiento que tuvo para ensayar apenas pudo hacerlo. Tres titulares en defensa se ausentaron. Por molestias se quedaron en el gimnasio Piqué, Arbeloa y Ramos. De los tres, el que más difícil tiene jugar en el Carlos Belmonte es Piqué, que acabó con fuertes molestias el partido del pasado viernes y Del Bosque puede no forzar.

Necesita un solo punto ante Georgia para sellar el pasaporte como líder de grupo al Mundial de Brasil y, en el ambiente de la selección, junto a la importancia del resultado aparece la necesidad de recuperar la brillantez. Colaborará a ello Andrés Iniesta, que volverá a ser titular, recuperado de sus molestias musculares.

El menú de trabajo tras el calentamiento fueron los habituales rondos, ejercicios de toque y presión, más un partido final en reducidas dimensiones en el que, de los titulares del pasado viernes, tan solo participaron Víctor Valdés, Nacho Monreal y Michu. Comenzaron el entrenamiento con el grupo Xavi Hernández, Sergio Busquets, Cesc Fábregas, David Silva y Pedro Rodríguez, pero se retiraron antes de tiempo para recuperar fuerzas y estar al cien por cien ante Georgia.

Del Bosque medita meter un lateral de largo recorrido como Juanfran Torres, junto a Iniesta puede introducir la novedad de Koke Resurrección en el centro del campo y dar la titularidad a Álvaro Negredo como nueve. Del Bosque no dio pistas sobre el portero que jugará de titular ante Georgia. Los tres comenzaron con su preparador, José Manuel Ochotorena, e intercambiaron portería en el partidillo final.

Cerca de 900 aficionados aprovecharon que era domingo para acercarse a La Ciudad del Fútbol de Las Rozas y seguir de cerca el entrenamiento a puertas abiertas de los internacionales españoles. Iker Casillas y Andrés Iniesta desataron la locura de los más pequeños cuando a la conclusión del entrenamiento, se acercaron a la grada para firmar autógrafos.