Mustafa Özil, padre y representante de Mesut Özil, se reunía a finales del pasado mes de mayo en las oficinas del Bernabéu con el director general del Real Madrid, José Ángel Sánchez. El objetivo no era otro que ampliar y mejorar el contrato del futbolista, con una ficha de 3,5 millones de euros netos por temporada, tratando que pasase a cobrar el doble. Hoy, casi cuatro meses después, Özil ya no es jugador del Real Madrid.
Este breve resumen explica a grandes rasgos por qué Özil juega en el Arsenal. Por dinero. Aunque el asunto en cuestión tiene un trasfondo: las ambiciones desmesuradas de Mustafa Özil. Él ha sido clave en la marcha del jugador.
Según fuentes del Real Madrid, el club se ha reunido en más de cinco ocasiones en este período de tiempo con Mustafa. Siempre con el aumento de sueldo de Özil como tema a tratar. "No es el momento" o "ahora mismo no es viable" fueron algunas de las respuestas que se llevó el nervioso e insistente padre de Mesut.
El Real Madrid no suele renovar contratos cuando al jugador le restan más de dos temporadas y éste era el caso de un Özil que, por otro lado, estaba contento en la capital de España. Era feliz en el Real Madrid, en un vestuario donde era valorado. Ahí están, por ejemplo, las manifestaciones públicas de Sergio Ramos o Álvaro Arbeloa.
Pero fue la insistencia de su padre lo que provocó que el jugador tomara la decisión de marcharse. Poco a poco fue haciéndole cambiar de idea. "No te respetan, han fichado a Isco y harán lo mismo con Bale", fueron algunas frases que le repetía a Mesut. En otras palabras, Mustafa presionaba a su hijo para forzar su salida.
Mustafa Özil estaba enfadado en mayo tras la primera reunión con José Ángel Sánchez en el Bernabéu. Su ambición era desmesurada, de ahí que su malestar fuera creciendo con el paso del tiempo. En las oficinas del club empezaron a cansarse de él. Sus exigencias eran claras: un contrato hasta el 30 de junio de 2019 y 7 millones limpios por temporada. Ante la negativa del Madrid, Mustafa empezó a sondear en Europa un posible traspaso. Múnich, Manchester y Londres fueron algunas de las ciudades donde trató de vender a su hijo.
Özil dijo el pasado mes de julio, durante un acto publicitario, que quería quedarse en el Real Madrid. Por aquel entonces, él no lo tenía tan claro, pero sucedió algo que quizá ni Mustafa se esperaba. El Real Madrid aceptaba negociar la salida de Mesut. El club estaba harto de las altas exigencias del agente y el técnico Carlo Ancelotti se había decantado por Di María al comprobar que el argentino sí demostraba en el terreno de juego su deseo de jugar en el Madrid.
Cierto es que Özil quería ser titular, y más teniendo en cuenta la cercanía del Mundial de Brasil, pero los deseos de ganar más dinero venían más por parte del padre que por parte del propio juador. Özil firmó finalmente por el Arsenal, un equipo en un escalón por debajo del Manchester United. Pero es que el club londinense sí le pagaba esos 7 millones netos por temporada y, lo que es también importante, Mustafa se llevaba esa comisión que tanto ansiaba, que puede llegar a los 10 millones de euros.
En el Real Madrid tienen claro que se ha marchado un gran jugador pero también que, con otro agente, Özil a buen seguro seguiría vistiendo de blanco.