Ander Herrera ha estado muy cerca de convertirse en nuevo jugador del Manchester United, pero finalmente tendrá que quedarse en el Athletic de Bilbao, al menos hasta el próximo mercado de invierno.
Tres emisarios del club inglés se desplazaron este lunes hasta Madrid, con la intención de depositar los 36 millones de euros de la cláusula de rescisión del futbolista en la sede de la Liga de Fútbol Profesional (LFP).
Sin embargo, al parecer los emisarios de los red devils no contaban con que debían depositar otros seis millones más en concepto de impuestos, con lo que finalmente se echaron atrás y la operación para fichar a Herrera no llegó a buen puerto.
Quien sí acaba recalando en Old Trafford, a cambio de unos 27 millones de euros, es el centrocampista belga Marouane Fellaini, procedente del Everton y quien ya estuvo a las órdenes del nuevo técnico del United, David Moyes, en el club de Goodison Park.
Herrera, de 24 años, llegó al Athletic en 2011 tras su fichaje del Zaragoza por 8,5 millones de euros. En su primera temporada en el club rojiblanco, fue uno de los pilares de la gran campaña que hizo el equipo dirigido entonces por el argentino Marcelo Bielsa junto con otros jugadores que ya han abandonado el club, como Fernando Llorente y Javi Martínez.
Herrera, que no jugó el pasado domingo ante el Real Madrid en el estadio Santiago Bernabeu, se entrenará este martes a partir de las 10:30 horas con el resto de la plantilla en las instalaciones de Lezama.