Faltan tres días para el clásico. Todas las miradas, una vez pasada ya la jornada de Champions, están puestas en el Camp Nou. Y no sólo por la polémica política que ahí se va a vivir. Pero es que un Barcelona-Real Madrid lo paraliza todo, y con razón. No obstante, son los dos mejores equipos del planeta.
Más allá de lo típico de que en un partido así no hay favorito, que nunca se sabe lo que puede pasar, y esa retahíla de tópicos antes del choque, cabe afrontar una duda, de las muchas que hay en las horas previas: ¿quién llega mejor al partido?
A pesar de lo que desprende la clasificación, y del mal arranque vivido, el Real Madrid llega en un buen momento al Camp Nou. Sus dos últimos choques, ante Deportivo y sobre todo Ajax, así lo confirman. Pero no sólo por los resultados; también por detalles que pueden llevar a un equipo de ser bueno a ser el mejor.
Por un lado, el tema Cristiano Ronaldo; el portugués ha pasado de la tristeza a encadenar dos hattricks consecutivos. Otro que ha crecido en los últimos choques ha sido Benzema, quien arrancó con algo de desidia, pero ya vuelve a estar enchufado, como demuestra su obra de arte ante el Ajax. Incluso algunos a los que no se esperaba, como Kaká, han demostrado estar listos para afrontar un choque crucial.
Además, a nivel de vestuario, las aguas parece que vuelven a su cauce. Después del perdón de Sergio Ramos ante su entrenador y sus compañeros, Mourinho le alabó posteriormente en rueda de prensa. Para confirmarlo, las bromas de los propios futbolistas blancos se han venido sucediendo en las últimas horas. Como una especie de conjura en una de las semanas más importantes de la temporada.
El Barça, impoluto
Pero si el Madrid, como decimos, llega en su mejor momento en lo que llevamos de temporada, el Barcelona no lo es menos. Como un escalador que llega a la cima con un ritmo constante, sin arreones, dejando a todos atrás poco a poco, el conjunto azulgrana suma una victoria detrás de otra casi sin darse cuenta.
Seis partidos de Liga, 18 puntos. Dos partidos de Champions League, 6 puntos. Es cierto que la imagen del nuevo Barcelona de Tito Vilanova quizá no sea tan brillante como en años anteriores, pero sí parece más efectiva. Y, además, con más carácter. Son ya varias las remontadas que ha llevado a cabo el conjunto azulgrana.
Eso sí, los problemas con las lesiones están golpeando al equipo. Puyol ha sido el último en caer, y no estará en el clásico. Piqué lo tiene complicado, aunque parece que forzará. Y Andrés Iniesta llegará entre algodones, lejos de su mejor forma. Por el contrario, el cuadro culé también ha vivido el despertar de dos futbolistas clave en los últimos días: Alexis Sánchez, que brilló con luz propia ante el Benfica, y Cesc Fàbregas, autor de tres tantos en los dos últimos encuentros.
Motivos más que suficientes para que el Barça, que recordemos es el que juega en casa, crea en la victoria y, de paso, dar un mazazo muy severo en la Liga. Pero ojo, que la última derrota del equipo azulgrana fue, precisamente, ante el Real Madrid. Y supuso el primer título de la temporada para los blancos.