La oportunidad de oro del portero proetarra

Zubikarai es un guardameta que lleva seis temporadas como suplente en la Real Sociedad. Apenas ha gozado de oportunidades desde que ascendiera al primer equipo donostiarra. De hecho, a sus 28 años, tan solo ha disputado un partido en Primera División. Y para la posteridad ha quedado su nefasta actuación el año pasado en Mallorca, en el encuentro de la Copa del Rey en el que encajó seis tantos.

Sin embargo, ahora se encuentra ante la oportunidad de su vida. Tras la lesión de Claudio Bravo, habitual meta titular, el portero nacido en Vizcaya será titular en el derbi que este domingo se disputará en Anoeta. "Siempre me he sentido respaldado aunque no haya jugado muchos partidos", ha declarado Zubikarai. Habrá que ver si la falta de actividad le pasará factura o no.

Hijo de etarra y simpatizante de los asesinos

El caso es que Eñaut Zubikarai fue noticia en Libertad Digital hace más de un año por temas completamente extradeportivos. El meta es hijo de Cándido Zubikarai, un etarra que cumple condena desde 1989 por participar en tres asesinatos, dos de ellos guardias civiles. Además, su madre también fue detenida el mismo año en que su marido ingresaba en prisión. Eñaut tenía entonces cinco años.

El guardameta, por otro lado, siempre se ha manifestado a favor de los presos de ETA, siendo simpatizante del entorno proetarra. Entre otros actos, el realista acudió el 19 de junio de 2009 al festival Hartotxu Rock y subió al escenario junto a decenas de personas, entre ellas varios niños, con carteles de presos etarras.

Teniendo en cuenta estos antecedentes, en el verano de 2011 el Hércules desestimó su cesión cuando ya estaba prácticamente cerrada. El club no conocía el entorno de Zubikarai, y su única preocupación fue valorar las cualidades deportivas de Zubikarai. Pero al confirmarse la noticia, gran parte de la afición se crispó y, el Hércules canceló la operación alegando falta de acuerdo económico con el jugador.

Pero según informó El Mundo, fuentes del club comentaron que "cuando interesa un jugador nos fijamos en sus cualidades, no en si es de derechas o de izquierdas o si le gustan los hombres o las mujeres. Pero esto es un tema que puede herir la sensibilidad de mucha gente". "Sabíamos que su estética era la típica abertzale, pero como la de tantos otros jóvenes vascos", añaden desde Alicante.

Además, no hay que olvidar que en marzo de 2011 Zubikarai se adhirió, junto a otros siete jugadores más de la Real Sociedad, a la manifestación convocada por el entorno de ETA en la que se exigía el traslado de los terroristas de la banda encarcelados a prisiones del País Vasco.