El holandés Max Verstappen (Red Bull) se anotó este domingo el lluvioso y esperpéntico Gran Premio de Bélgica, el duodécimo del Mundial de Fórmula 1, que, tras varias interrupciones y aplazamientos, se disputó a sólo dos vueltas —en lugar de a las 44 previstas—, por detrás del coche de seguridad, valorándose sólo la mitad de los puntos.
En lugar de 25, Verstappen sumó doce puntos y medio al ganar por delante de los ingleses George Russell (Williams, que se llevó nueve unidades) y Lewis Hamilton (Mercedes), siete veces campeón del mundo, que fue tercero y sigue líder del Mundial, después de sumar siete puntos y medio: con 202,5, tres puntos más que el neerlandés de Red Bull.
La carrera, cuyo arranque estaba previsto a las tres de la tarde (13:00 horas GMT), se acabó retrasando en tres plazos hasta que, a las a las tres y 25 (13:25 GMT), los monoplazas empezaron a rodar detrás del coche de seguridad, sin que se supiese aún si se daría la salida desde parrilla o detrás del safety car. Después de completar una vuelta al circuito más largo del Mundial (7.004 metros) y ante la evidencia de la peligrosidad por las condiciones de la pista y la falta de visibilidad, se decretó bandera roja y todos los coches regresaron a garajes.
Después de varios anuncios referentes a nuevas informaciones y más de tres horas después del horario previsto, todos salieron a pista para dar dos vueltas detrás del coche de seguridad antes de decretar una nueva bandera roja; con el fin de que hubiese al menos una clasificación y que la prueba puntuase la mitad.
La posibilidad de que la carrera se aplazase hasta el lunes era desde el punto de vista logístico, inviable, porque el próximo fin de semana se corre de nuevo, en Holanda.
El australiano Daniel Ricciardo (McLaren) fue cuarto en una carrera que el español Carlos Sainz (Ferrari) acabó décimo y sumó, por ello, medio punto. El madrileño sigue sexto en el Mundial, ahora con 38 puntos y medio. Su compatriota Fernando Alonso (Alpine) acabó undécimo y el mexicano Sergio Pérez (Red Bull), vigésimo.
Checo, que hubiese salido séptimo, chocó en la vuelta de instalación y en un principio parecía que se perdería la carrera al dañar la suspensión delantera. Con los aplazamientos y las interrupciones, Red Bull arregló su coche y le permitieron salir desde el 'pit lane', únicamente para acabar en el puesto en el que salió: el vigésimo.
El alemán Sebastian Vettel (Aston Martin) y el francés Pierre Gasly (Alpha Tauri) fueron quinto y sexto, en una carrera que el francés Esteban Ocon, compañero de Alonso en Alpine, acabó séptimo.
También puntuaron Charles Leclerc —el compañero de Sainz en Ferrari—, que acabó octavo; y el canadiense Nicholas Latifi (Williams), noveno. La próxima carrera, el Gran Premio de Holanda, se disputará el próximo fin de semana en Zandvoort.