El piloto finlandés Kimi Räikkönen (Ferrari) fue el más rápido en el segundo entrenamiento libre para el Gran Premio de China de Fórmula 1, tercero del Mundial de 2016, mientras el español Fernando Alonso (McLaren) cerró la prueba en undécima posición. Carlos Sainz (Toro Rosso) fue octavo.
El piloto nórdico completó así, en la mejor de sus 34 vueltas de este viernes, los 5.451 metros de la pista china con un tiempo de 1 minuto, 36 segundos y 896 milésimas.
Le siguió en la tabla, como segundo más veloz, su compañero de escudería, el alemán Sebastian Vettel, por lo que los Ferrari se mostraron más rápidos durante la tarde que los Mercedes, que no sólo encabezan el Mundial por el momento, sino que también habían liderado el entrenamiento inicial de esta mañana.
El pentacampeón germano cubrió así en esta segunda sesión libre, en la mejor de 33 vueltas, el trazado del circuito shanghainés a 109 milésimas de su compañero.
El tercer lugar fue para su compatriota Nico Rosberg (Mercedes), que esta mañana había sido el más rápido, y por la tarde acabó a 237 milésimas de Vettel, tras intentarlo 33 veces, mientras que cuarto fue el británico Lewis Hamilton, a 433 milésimas, tras completar 33 vueltas.
Por su parte, Alonso, que al comienzo de la prueba llegó a ponerse cuarto, consiguió marcar finalmente el undécimo mejor tiempo, tras intentarlo 31 veces esta tarde, y llegar a cerrar su mejor vuelta a 1 segundo y 832 milésimas de Rosberg, con una crono de un minuto, 38 segundos y 728 milésimas.
El asturiano recibió el visto bueno definitivo de la FIA para competir ya el resto del fin de semana, después de superar una nueva prueba médica de confirmación, nada más terminar el entrenamiento de esta mañana.
Tal y como aseguraba sentirse ayer, Alonso parece haberse recuperado lo suficiente de sus heridas por el violento accidente que sufrió hace casi un mes en el Gran Premio de Australia, que le impidió competir en el de Baréin, por lo que no se había vuelto a subir a un monoplaza hasta esta misma mañana.
Según acordaron hoy el jefe médico de la FIA y su homólogo de la etapa china, el bicampeón español fue declarado "en forma para participar en todas las sesiones restantes de este fin de semana", aunque bajo la condición de detenerse inmediatamente y volver a ser examinado si llega a sentir cualquier síntoma anormal.