La Federación Internacional del Automóvil (FIA) está buscando más información de McLaren sobre el accidente que sufrió Fernando Alonso durante los tests de pretemporada en Montmeló (Barcelona) y que ha provocado que el asturiano no pueda estar por precaución en el Gran Premio de Australia, la carrera que este domingo inaugura el Mundial de Fórmula 1.
El estado de salud del bicampeón del mundo ha estado rodeado de controvertidas informaciones sobre su extraño accidente, en las que se indicaban que pudo recibir una descarga eléctrica y que habría perdido la memoria momentáneamente cuando recuperó la consciencia.
"Estamos trabajando con McLaren y nuestro departamento médico todavía está mirando toda la información que podemos encontrar. Todavía estamos hablando con McLaren sobre algo mecánico. Nuestro departamento médico está hablando con la gente que le trató en el hospital y es todo lo que puede decir realmente sobre esto", apuntó Charlie Whiting, director de Carrera de la F1.
McLaren confirmó en un comunicado tras el accidente del pasado 22 de febrero que fue una racha de viento la que provocó el percance y ha negado con firmeza que se produjese por un fallo mecánico, aunque ha concedido que el español sufriese una pérdida temporal de memoria, aclarando que la había recuperado.
Por su parte, el jefe de la escudería, Ron Dennis, admitió este miércoles, en declaraciones al diario británico The Telegraph, que mintió al negar la conmoción cerebral de Alonso, y se escudó diciendo que "hay un montón de complejidades" que "van más allá de mi área de especialización".