El jefe de la escudería Red Bull, Christian Horner, ha criticado la decisión de la FIA de sólo excluir a Mercedes del Test de Jóvenes Pilotos y considera que fue demasiado indulgente para disuadir a los infractores. "Ellos consideran que es ilegal haber hecho las pruebas, pero la sanción por hacer esa prueba no encaja, en nuestra opinión, con el delito. Creo que necesitamos una mayor claridad de la FIA para aclarar lo que está y no está permitido", declaró Horner.
Un tribunal de París sancionó a Mercedes por realizar unos entrenamientos ilegales con neumáticos Pirelli en Montmeló. La escudería argumentó que la prueba la llevó a cabo por Pirelli, que no compite en el campeonato, y que la decisión era conocida por el responsable técnico de la FIA, Charlie Whiting.
"El veredicto fue, creo, correcto. Mercedes fueron declarados culpables de quebrantar las normas deportivas y el código deportivo. Lo que es un poco confuso es la levedad de la pena. El problema de la pena es que no es un fuerte elemento de disuasión para romper los reglamentos deportivos", consideró.