El piloto alemán Sebastian Vettel, de Red Bull, ha advertido sobre el circuito de Shanghai, escenario el domingo 14 de abril del Gran Premio de China, tercera prueba del Mundial, especialmente por su cantidad de curvas que lo convierten en un reto para los competidores y "los neumáticos".
"El circuito tiene muchas curvas, lo que le convierte en duro para los neumáticos y engañoso para los pilotos", asegura Vettel en declaraciones facilitadas por su escudería este viernes.
El líder del Mundial afirma que le gusta sobre todo "el sector medio" del trazado chino. "Las curvas 12 y 13 son difíciles de entender, por lo que demandan mucha técnica, especialmente la segunda la cual lleva a una realmente larga recta", subraya.
De todos modos, el germano guarda buenos recuerdos del Gran Premio de China, donde consiguió su "primera victoria" con la escudería austriaca en 2009. "Tuvimos una buena calificación, y luego una carrera asombrosa. Hubo mucha lluvia, pero conseguimos nuestra primera victoria de equipo y el doblete", recuerda.
Por su parte, su compañero de equipo, el piloto australiano Mark Webber, prefiere quedarse con la "tercera plaza" que conquistó en 2011 "tras salir de la parte de atrás de la parrilla de salida". Sobre el circuito de Shanghai, el oceánico apuesta por "el sector medio, con las curvas 5 y 6". "Es un sitio bonito y una sección muy fluida donde es muy importante tener la técnica correcta", advirtió.