L D (EFE) Verdasco, de veinte años, confirmó, de este modo, la excelente progresión que ha mostrado a lo largo de la presente temporada, en la que el madrileño además del título de campeón de España, conquistó el pasado mes de abril en Valencia su primer torneo como profesional. Escudado en sus potentes zurdazos, Verdasco, que sucede en el palmarés al toledano Feliciano López, impuso su mayor experiencia sobre la pista para derrotar en poco más de una hora a Guillermo García, auténtica revelación del torneo.
El tenista madrileño conocedor del demoledor golpe de derechas de su oponente, buscó constantemente el revés del manchego, con el fin de evitar los tremendos raquetazos con los que García apeó, y sacó de quicio, a Feliciano López en los cuartos de final y a David Ferrer en las semifinales. Obligado a jugar con su revés, García, como el mismo reconoció a la conclusión del encuentro, trató de retomar la iniciativa con continuos golpes ganadores, que a diferencia de en jornadas anteriores, en esta ocasión no le entraron al de La Roda.
Sin poder recurrir a su derecha, las opciones de victoria de García se redujeron a su potente servicio, faceta en la que también se mostró superior Verdasco, que restó con una inusitada facilidad los cañonazos del manchego. Precisamente, la fiabilidad en el resto permitió al madrileño, número 40 del mundo, romper el servicio de García en el cuarto juego del primer set, otorgándole una ventaja en el marcador de 3-1 que ya sería insalvable para el albaceteño, que finalmente cedió la manga por 6-3.
Dos nuevos "breaks" en el tercer y en el noveno juego de la segunda manga dieron el triunfo definitivo (6-3) a Verdasco, que no ha cedido ni un solo set en los cinco encuentros que ha disputado sobre la tierra del Club Internacional de Tenis de Majadahonda. Unos números que llenan de confianza a Verdasco, que este mismo año ya jugó, también sobre tierra batida, la final del torneo de Acapulco.
El tenista madrileño conocedor del demoledor golpe de derechas de su oponente, buscó constantemente el revés del manchego, con el fin de evitar los tremendos raquetazos con los que García apeó, y sacó de quicio, a Feliciano López en los cuartos de final y a David Ferrer en las semifinales. Obligado a jugar con su revés, García, como el mismo reconoció a la conclusión del encuentro, trató de retomar la iniciativa con continuos golpes ganadores, que a diferencia de en jornadas anteriores, en esta ocasión no le entraron al de La Roda.
Sin poder recurrir a su derecha, las opciones de victoria de García se redujeron a su potente servicio, faceta en la que también se mostró superior Verdasco, que restó con una inusitada facilidad los cañonazos del manchego. Precisamente, la fiabilidad en el resto permitió al madrileño, número 40 del mundo, romper el servicio de García en el cuarto juego del primer set, otorgándole una ventaja en el marcador de 3-1 que ya sería insalvable para el albaceteño, que finalmente cedió la manga por 6-3.
Dos nuevos "breaks" en el tercer y en el noveno juego de la segunda manga dieron el triunfo definitivo (6-3) a Verdasco, que no ha cedido ni un solo set en los cinco encuentros que ha disputado sobre la tierra del Club Internacional de Tenis de Majadahonda. Unos números que llenan de confianza a Verdasco, que este mismo año ya jugó, también sobre tierra batida, la final del torneo de Acapulco.