L D (EFE) Federer ganó con las armas predilectas de su adversario. El croata es un especialista con el saque, en el que basa todo su juego. De hecho, alcanzó la semifinal tras obtener 38 saques directos contra el checo Tomas Berdych. Ante el helvético, que obtuvo el pasado año la corona del torneo de su ciudad natal, se quedó en 16. Federer mantuvo el tipo. Nunca perdió su saque y llevó el choque al desempate, donde estuvo menos errático que Karlovic.
Federer se medirá a Nieminen, al que ha ganado siempre en las siete ocasiones que se han enfrentado. Eso sí, no coinciden desde el año 2005, en el torneo de Bangkok. El finlandés ganó con claridad a Baghdatis en 73 minutos. "He jugado muy bien esta semana y he ganado mucha confianza en mi juego. Salvar los puntos de partido en las primeras rondas me dieron mucha seguridad", declaraba Nieminen, el primer finlandés que ganó un torneo de la ATP, el año pasado en Auckland.
Baghdatis cedió el primer set al cometer una doble falta en el juego de desempate y perdió su servicio en el tercer juego de la segunda manga. "Estaba muy cansado tras el partido de dobles de anoche, y no he dormido bien", se justificaba el chipriota, que junto a su pareja el polaco Stanislav Wawrinka consiguieron el pase a las semifinales de dobles pasada la media noche. Nieminen, número 29 en la lista mundial, ha jugado con anterioridad seis finales y sólo ha ganado la de Auckland en 2006.