L D (EFE) Federer, campeón de Wimbledon, venció a Ferrero, que no ha podido superar la lesión que viene padeciendo, para convertirse en el primer suizo que logra la final en Melbourne, donde el domingo luchará contra Safin, que sigue descansando en su hotel tras vencer al estadounidense Andre Agassi el jueves por 7-6 (8-6), 7-6 (8-6), 5-7, 1-6 y 6-3.
El helvético sucederá a Andy Roddick en la clasificación mundial que aparecerá el lunes, en la que Ferrero será el dos y el de Nebraska el tres. Les seguirán Agassi, campeón del Abierto de Australia en 2003, y el argentino Guillermo Coria. Su acceso a la final le permite a Federer liderar esta lista y convertirse en el vigésimo tercer jugador que alcanza el número uno mundial desde que el ordenador del ATP empezó a funcionar en 1973, sustituyendo a Roddick que ha estado al mando 13 semanas (desde el tres de noviembre de 2003).
Falto de la movilidad que le caracteriza normalmente, debido a su lesión en el aductor izquierdo que se produjo en el partido contra el rumano Andrei Pavel y que luego se traspasó al derecho, Ferrero apenas pudo plantear la batalla que él hubiera deseado contra Federer, con quien tenía hasta ahora un balance oficial de 3-3, aunque hace dos semanas en la final del torneo de exhibición de Hong Kong, el español le derrotó en dos sets. No obstante, Ferrero dispuso de una gran ocasión, con cuatro puntos de ruptura en el séptimo juego del primer set que podrían haber cambiado el signo del partido. Pero el suizo desbarató la primera con un ace, la siguiente con un punto de servicio y la tercera con una genial volea de revés. El de Onteniente mantuvo su saque a continuación, pero en el décimo no se concentró lo necesario y lo cedió en blanco para dejar escapar el set en 33 minutos.
Once victorias consecutivas de Federer
Los cinco juegos consecutivos que Federer ganó desde el 4-4 del primer set al 3-0 del segundo minaron la moral de Juan Carlos Ferrero, que apenas podía ejecutar sus golpes con la limpieza que acostumbra, sin poder flexionar ni mantener los tiros en carrera. Así poco podía hacer ante la mayor regularidad de su oponente. Enrabietado, Juan Carlos se quitó a comienzos del segundo set el vendaje de protección del muslo izquierdo para liberarse y poder correr con mayor facilidad, pero no le sirvió de mucho. De nuevo cedió su saque en el 5-1 y el suizo aprovechó su primera oportunidad para llevarse la manga. En la tercera, Ferrero mantuvo el tipo hasta el séptimo juego, pero allí un resto de su rival a los pies acabó con sus esperanzas de convertirse en el cuarto español en alcanzar la final de este primer Grand Slam.
Federer lleva con esta once victorias consecutivas, ganando los cinco partidos que disputó en la Copa Masters de Houston a finales del pasado año. Su preparación para el Abierto de Australia ha consistido en dos torneos de exhibición. Uno en Hong Kong hace dos semanas y el clásico de Kooyong, hace siete días donde ganó al sueco Thomas Johansson, y Alex Corretja, y perdió contra Agassi. Su preparación había sido cuestionada como también su obsesión de viajar sin un entrenador desde que decidió romper con el sueco Peter Lundgren en diciembre. Ahora su actuación en el Melbourne Park le ha dado la razón. Del duelo Fededer-Safin saldrá un nuevo campeón del torneo. Se han enfrentado en cuatro ocasiones, con el suizo venciendo en tres de ellas, aunque en la última en los cuartos de final de Moscú, sobre moqueta, se impuso Marat por 7-5 y 6-4.