L D (EFE) Tanto el seleccionador español como el argentino decidieron repetir el mismo quinteto inicial que habían alineado ante Rusia y Paraguay, respectivamente, pero fueron los españoles los que buscaron con más ímpetu la victoria a lo largo de los cuarenta minutos. El capitán español, Javi Rodríguez, y Torras fueron los que comenzaron a llevar peligro a la portería defendida por Javier Guisande. Fue así como España asfixió con su presión a Argentina, que apenas pudo pasar de medio campo ante un equipo que se mostró mejor técnicamente y con más claridad de ideas que los suramericanos.
La entrada de Fernandao en la pista acrecentó el dominio español. Fue el hispano-brasileño quien gozó de las mejores ocasiones en la primera mitad y en una de ellas, tras un pase desde la derecha de Javi Rodríguez, remató desde el punto de doble penalti un fuerte disparo que terminó en el fondo de la portería albiceleste, a los catorce minutos y nueve segundos. Cuando parecía que se llegaría al descanso con ventaja mínima española, una gran jugada del capitán Garcías, a falta de sólo dos segundos para el final de la primera parte, significó el empate a uno con un lanzamiento desde el punto de penalti después de hacer una pared con Matías Lucuix, argentino del Caja Segovia de la liga española.
Tras el descanso, una gran jugada de Lucuix, que sorteó a dos rivales, obligó a Luis Amado a realizar una gran intervención para evitar el segundo tanto argentino, al primer minuto de juego. La insistencia de los vigentes campeones del torneo y de Europa tuvo premio un minuto más tarde, cuando Javi Rodríguez, desde fuera del área, remató un córner raso con un tremendo disparo que se estrelló en el palo derecho de la portería argentina. Ortiz, atento al rechace, se anticipó a la defensa y pudo enganchar un disparo que significó el segundo gol español. Con ventaja en el marcador, España se dedicó a dormir el partido y a crear peligro al contraataque ante una selección argentina que lo intentó con más corazón que cabeza y que no pudo lograr la misma hazaña del sábado, en la que remontó un 2-0 en contra ante Paraguay.
La victoria significa la clasificación de la selección española para las semifinales del torneo cuando todavía tiene que disputar el martes el último partido de la segunda fase ante Paraguay. Argentina, cuarta en el Mundial anterior, necesitará ganar a Rusia y que España derrote a Paraguay para lograr el milagro de clasificarse para las semifinales.
La entrada de Fernandao en la pista acrecentó el dominio español. Fue el hispano-brasileño quien gozó de las mejores ocasiones en la primera mitad y en una de ellas, tras un pase desde la derecha de Javi Rodríguez, remató desde el punto de doble penalti un fuerte disparo que terminó en el fondo de la portería albiceleste, a los catorce minutos y nueve segundos. Cuando parecía que se llegaría al descanso con ventaja mínima española, una gran jugada del capitán Garcías, a falta de sólo dos segundos para el final de la primera parte, significó el empate a uno con un lanzamiento desde el punto de penalti después de hacer una pared con Matías Lucuix, argentino del Caja Segovia de la liga española.
Tras el descanso, una gran jugada de Lucuix, que sorteó a dos rivales, obligó a Luis Amado a realizar una gran intervención para evitar el segundo tanto argentino, al primer minuto de juego. La insistencia de los vigentes campeones del torneo y de Europa tuvo premio un minuto más tarde, cuando Javi Rodríguez, desde fuera del área, remató un córner raso con un tremendo disparo que se estrelló en el palo derecho de la portería argentina. Ortiz, atento al rechace, se anticipó a la defensa y pudo enganchar un disparo que significó el segundo gol español. Con ventaja en el marcador, España se dedicó a dormir el partido y a crear peligro al contraataque ante una selección argentina que lo intentó con más corazón que cabeza y que no pudo lograr la misma hazaña del sábado, en la que remontó un 2-0 en contra ante Paraguay.
La victoria significa la clasificación de la selección española para las semifinales del torneo cuando todavía tiene que disputar el martes el último partido de la segunda fase ante Paraguay. Argentina, cuarta en el Mundial anterior, necesitará ganar a Rusia y que España derrote a Paraguay para lograr el milagro de clasificarse para las semifinales.