(Libertad Digital) No ha podido comenzar de mejor manera la selección española este campeonato europeo de selecciones. Los hombres de Mario Pesquera han anulado a Serbia y Montegro basándose en una gran defensa, el dominio en el rebote y un gran acierto de sus hombres clave: Navarro, 27 puntos, Calderón, 17, e Iñaki de Miguel, 14.
Desde el primer minuto del partido, España fue manejando el marcador y el juego, ahogando a los locales con su fuerte defensa, cambiando de zona a individual, y dominando el rebote pese a la diferencia de altura entre los hombres altos de ambos equipos. Navarro comenzaba fuerte el primer cuarto mientras Obradovic se despesperaba. El resultado al final del primer cuarto era de 13-21 y las cosas no tenían visos de cambiar.
El segundo cuarto estuvo protagonizado por las rotaciones de los dos banquillos. España seguía dominando el rebote y Serbia se mostraba muy errática en sus tiros. La defensa de los nuestros y el buen hacer de Rudy Fernández e Iñaki de Miguel daba al traste con las intentonas serbias. Con diez puntos abajo, Obradovic pidio un tiempo muerto porque su equipo se estaba cargando de faltas, pero no consiguió frenar esta escalada ni la anotación de los españoles. Ni Rakocevic, ni Gurovic, ni Bodiroga conseguían derribar la defensa zonal del equipo español, que se iba al descanso con una ventaja de 13 puntos (30-43).
Tras el descanso, la tónica fue la misma. Gurovic se cargaba de personales y España conseguía una máxima ventaja de 15 puntos gracias a un riple de Navarro. Felipe Reyes y Calderón despertaron y frenaron otro intento de reacción de Gurovic, Stepanovic y Rakocevic. Los tres serbios tenían la muñeca caliente pero la selección no perdió los papeles y contrarrestó la anotación desde el perímetro de su rival. A pocos minutos del final del tercer período, Serbia llegó a acercarse a 10 puntos, pero a Garbajosa no le tembló la mano tampoco y anotó un triple que dejó las cosas con un 56-70 que dejaba visto para sentencia el partido.
El último cuarto fue un mero trámite. El silencio se hizo en el Vojvodina Center y los aficionados serbios acabaron pitando a los suyos y aplaudiendo los triples de unos inspiradísimos Calderón, Navarro y de Miguel. Obradovic sacó a la artillería triplista pero en el otro bando, el base de los Toronto Raptors demostraba por qué es jugador de la NBA. Bodiroga y Jaric estuvieron grises como el resto de sus compañeros y nada pudieron hacer para que al final España aumentara la diferencia final hasta los 19 puntos (70-89).
La competición continúa y de nada sirve esta gran victoria si mañana sábado España no vence también a Letonia, a la que se enfrentará a partir de las 17.3