
(Libertad Digital) El partido enfrentaba a los equipos Vitebsk y Naphthane, de la Liga bielorrusa de divisiones menores. Según los datos ofrecidos por varios medios locales, el árbitro tuvo en todo momento una actitud extraña, moviéndose muy poco y tardando más de la cuenta en tomar decisiones. De hecho, los últimos 20 minutos los pitó desde el centro del campo.
Al final del partido, el cuarto árbitro se acercó a Sergei Shmolik e intentó convencerle para abandonar el terreno de juego. Shmolik simuló una vieja lesión de espalda y mientras se dirigía a los vestuarios fue jaleado por buena parte de los asistentes. Poco después, una prueba comprobó que tenía 2,6 miligramos de alcohol en la sangre.
El mencionado árbitro no es ningún desconocido en su país. De hecho ha pitado ya 247 partidos de la primera división y fue elegido en 2005 como el mejor del año.