Tras el descanso, el equipo otomano salió más ofensivo, colgando balones desde las bandas en busca del punto débil que había evidenciado el Zaragoza en el primer periodo. Pero tras el ímpetu inicial, de nuevo con dos opciones tras errores defensivos en balones colgados, los maños retomaron el control del esférico frente a un adversario sin ideas y con muy poquito empaque. El equipo de Víctor Muñoz marcó el tanto que a la postre sería el de la victoria en el minuto 72 en una jugada similar: una falta ensayada en la que se quedó solo Galletti, cuyo disparo cruzado lo remató a las mallas Alvaro Maior en el segundo palo. El gol puso todavía más en evidencia las carencias ofensivas del equipo turco que fue incapaz de crear peligro, salvo a falta de tres minutos para la conclusión cuando Alex envió a las nubes un buen balón tras una cesión atrás de un compañero.
Crónica del Dinamo de Kiev 0 - Villarreal 0
Al Dinamo y al Villarreal les costó adaptarse al pesado terreno de juego y eran incapaces de dar más de tres pases seguidos con criterio. Sin embargo, los españoles, durante el primer cuarto de hora, pudieron adelantarse en el marcador, aunque Lucho Figueroa disparó a las manos del meta ucraniano cuando se encontraba en una inmejorable situación para anotar el 0-1. El Villarreal tuvo en Marcos Senna a su hombre más destacado en la medular, pues el brasileño se multiplicó para frenar el ataque local y fue la referencia en el juego ofensivo.
El Dinamo de Kiev se entonó en el ecuador del primer período con la aparición por banda de Husyev y las acciones individuales de Kléber, que a cinco minutos del descanso pudo batir a Reina con un colocado disparo que salió rozando el poste. En la reanudación, tras cambiarse el balón rojo por uno blanco para mejorar la visibilidad, de nuevo el equipo castellonense tuvo una ocasión inmejorable gracias a una excepcional jugada personal de José Mari.
Pero fue entonces cuando el equipo ucraniano tomó el mando del partido. La mayor agresividad del Dinamo provocó que el juego se abriera y que el balón rondara con peligro en ambas áreas, aunque ni unos ni otros se mostraron acertados en el remate. Con el paso de los minutos, el submarino amarilo se fue apagando y el Dinamo, sin crear grandes ocasiones, se hizo dueño del choque, lo que provocó que Pellegrini apostara por sacar a su estrella, Juan Román Riquelme, con el fin de revertir la situación. Pero el argentino se mostró gélido, como el ambiente, y apenas puedo aportar nada. El Dinamo echó el resto en los minutos finales en busca del gol, pero las buenas intervenciones de Reina permitieron al Villarreal salvar el empate.