L D (EFE) Con su victoria, el Bremen acumula nueve puntos de ventaja sobre el Bayern, el segundo en la clasificación, y resulta ya inalcanzable a falta de dos jornadas para que termine la Bundesliga. Los goles del Werder Bremen fueron marcados por el croata Ivan Klasnic, el francés Johan Micoud y el brasileño Ailton, mientras que el gol bávaro lo marcó el holandés Roy Makaay. El primer gol, marcado por Klasnic en el minuto 19, se produjo tras un falló garrafal del meta bávaro Oliver Kahn, que trató de cortar un centro inofensivo de Ailton y dejó que el balón le rebotara en los brazos para que quedará en los pies del delantero croata, que no tuvo problemas en marcar a puerta vacía desde unos 13 metros de distancia.
Ese error de Kahn fue el comienzo de la derrota bávara en un partido para el que los dirigentes y jugadores del Bayern habían estado calentando el ambiente durante la semana. El centrocampista Michael Ballack había dicho que el Bremen estaba nervioso y que terminaría tirando el título en las últimas jornadas y el director deportivo Uli Hoennes, entre otros, había apelado a los jugadores a salir al campo en plan de aniquilar al Bremen. En el minuto 36 el marcador ya estaba 3-0 a favor del Bremen, después de que Micoud marcará el segundo, pasando el balón suavemente por encima del cuerpo de Kahn cuando este salió a cortarle el ángulo y más tarde Ailton clavara el balón en la escuadra para finiquitar un contragolpe, haciendo el tercero.
La hinchada del Bremen, que había acompañado a su equipo a Múnich, empezó desde antes de la pausa a celebrar el título que sabía mejor cuando se lograba junto con una victoria contundente sobre el Bayern en su propio estadio. En el segundo tiempo, el descuento, logrado por Makaay en el minuto 56, le dio una apariencia un poco más amable a la derrota para los bávaros, pero ya era demasiado tarde para evitar el cuarto título liguero del Bremen.
Ese error de Kahn fue el comienzo de la derrota bávara en un partido para el que los dirigentes y jugadores del Bayern habían estado calentando el ambiente durante la semana. El centrocampista Michael Ballack había dicho que el Bremen estaba nervioso y que terminaría tirando el título en las últimas jornadas y el director deportivo Uli Hoennes, entre otros, había apelado a los jugadores a salir al campo en plan de aniquilar al Bremen. En el minuto 36 el marcador ya estaba 3-0 a favor del Bremen, después de que Micoud marcará el segundo, pasando el balón suavemente por encima del cuerpo de Kahn cuando este salió a cortarle el ángulo y más tarde Ailton clavara el balón en la escuadra para finiquitar un contragolpe, haciendo el tercero.
La hinchada del Bremen, que había acompañado a su equipo a Múnich, empezó desde antes de la pausa a celebrar el título que sabía mejor cuando se lograba junto con una victoria contundente sobre el Bayern en su propio estadio. En el segundo tiempo, el descuento, logrado por Makaay en el minuto 56, le dio una apariencia un poco más amable a la derrota para los bávaros, pero ya era demasiado tarde para evitar el cuarto título liguero del Bremen.