El Villarreal arranca un punto ante el Lille en un partido mediocre (0-0)

L D (EFE) El Lille ha evidenciado las carencias de un equipo que juega de prestado en la Liga de Campeones, como juega de prestado en el Estadio de Francia. Pero con lo poco que tienen, con su escuadra joven e inexperta, al Lille le bastó para sacar los colores a un desdibujado Villarreal que, sin renunciar a su juego técnico, se diluyó en la impotencia de trenzar jugadas de peligro. Los levantinos carecen de la frescura de la pasada temporada, aunque podrán conformarse con haber arrancado un punto en su viaje a Francia, justo lo que había pedido Pellegrini: sumar y seguir.

Pero la imagen dejada en París ha sido la de una formación mediocre, destinada a sufrir entre los grandes del continente si quiere conquistar una de las dos plazas del grupo. Apenas mostraron una acción que los pocos aficionados amarillos que asomaban hubieran podido llevarse a la boca. Enseguida cada equipo dejó claras sus intenciones en el campo y, mientras el Villarreal se preocupó de cuidar la pelota, el Lille practicó un juego más directo y buscó con más verticalidad el área rival. La apuesta dio mejores resultados a los hombres de Claude Puel durante los primeros minutos y, cuando el reloj sólo había descontado tres, ya habían amenazado en dos ocasiones la meta levantina, una por medio de Moussilou y otra del joven nigeriano Odemwingie.

Le costó al Villarreal equilibrar la contienda y su juego de toque se vio dificultado por la ausencia en la zona de creación de Marcos Senna, un hombre sacrificado para que Tacchinardi y Josico, más defensivos, camparan en el centro del campo. A ello se sumó el plan de Puel para anular a Riquelme, marcado de cerca y un tanto perdido en la maraña de defensas franceses. Así las cosas, el Villarreal creó poco y el Lille tampoco se prodigó en el área rival. Sólo un par de centros a la espalda de la defensa española despertaron al público galo de su letargo, pero el juez de línea anuló los dos intentos por fuera de juego. Lucho Figueroa y Forlán también aportaron su dosis de peligro. El segundo se marchó en un rápido contragolpe a los 28 minutos, lo que obligó al brasileño Schmitz a derribarle en una jugada que pudo costarle la expulsión, pero que el colegiado dejó en tarjeta amarilla.

Riquelme lo intentó en un lanzamiento de falta a la media hora que lamió el poste, aunque la mejor ocasión la tuvo Figueroa en una jugada embarullada que el argentino, a base de pundonor, convirtió en disparo a puerta, aunque Sylva lo mandó a córner. A la vuelta de las duchas, Senna reemplazó a Sorin, pero el cambio no surtió el efecto deseado y el Lille se hizo con el control del partido. Sus ataques se hicieron más persistentes, sobre todo los de Moussilou y Odemwingie. El primero pudo marcar un centro del nigeriano a los 54 minutos y el segundo estrelló un balón en el larguero dos más tarde. En el minuto 69, el balón se paseó frente a la portería española y Viera salvó a su equipo al detener un buen cabezazo de Makoun. La mala puntería francesa congeló el resultado y dejó frío a los franceses.