El espíritu de hombres como Llull, Felipe Reyes, Marco Jaric, Garbajosa o Lavrinovic han la victoria al Real Madrid frente a un Efes en el que brilló Charles Smith, que sumó 18 puntos y fue una pesadilla para los blancos. Pero la 'Araña' fue eliminado al final del choque, justo cuando su grupo más le necesitaba. En el conjunto turco, clasificado cuarto en su grupo en la primera fase de la Euroliga, juegan hasta nueve jugadores que han pasado por la Liga española, tres de ellos, Tunçeri, Rakocevic y Charles Smith, lo hicieron en el Real Madrid.
El inicio del equipo local, que tenía la baja de Hansen, no fue bueno. Los turcos dominaron los diez primeros minutos en defensa, en rebote y en el marcador con un parcial de 13-19 y con Charles Smith destacando entre los hombres de Ataman. El técnico blanco, Messina, utilizó hasta diez jugadores, pero no consiguió dar con un equipo que lo hiciera como tal en ese primer cuarto. Un triple de Thorton en el minuto 13 llevó la ventaja del campeón turco a nueve puntos de diferencia (13-22), la máxima hasta entonces, y el nerviosismo a las gradas, pero a partir de ahí con la vuelta de Prigioni y Lavrinovic, el Madrid comenzó a recortar las diferencias.
Los madridistas superaron la zona defensiva de los estambulíes, con triples de Llull, un supermotivado Lavrinovic y Kaukenas. El Madrid daba la sensación de encontrarse a sí mismo poco a poco y el Efes perdía la puntería que había exhibido al principio, cuando cada uno de sus ataques se contaba en una canasta. Lavrinovic fue el más destacado en el conjunto español durante la primera parte con nueve puntos, tres rebotes y una asistencia, para obtener una valoración de 10, mientras que Thorton y Smith eran los mejores entre sus rivales con 5 y 6 puntos, respectivamente, y una nota de 9 cada uno.
Las defensas no existieron al comienzo de la segunda mitad. Ganaría el que se aplicase en esa faceta. La "aparición" de Garbajosa, tras su comienzo flojo, con cuatro puntos consecutivos y un rebote llevó al Madrid al empate (44-44) en el minuto 24, y dos tiros libres del pívot lo pusieron por delante en el 26. Y fue el equipo local el que apretó en defensa, tampoco lo bordó, pero sí hizo lo suficiente para lograr tres puntos de diferencia después del tercer periodo (56-53). Smith con dos triples seguidos y un robo de balón a Llull devolvió la ventaja a los suyos (60-61) a siete para el final. El Madrid parecía empeñado en llegar con el marcador ajustado al último minuto y perdía dos balones seguidos en ataque que llevaban a Prigioni al banquillo.
Siete puntos consecutivos de Jaric dieron vida al equipo español, Llull robó un balón en defensa y propició la quinta de Smith, el alma del Efes con 18 puntos, para que los blancos tomaran cuatro puntos de diferencia (71-67), y a dos para el final, una entrada a canasta del base local, provocó otra personal, para sumar una canasta y un tiro libre y darle siete puntos de ventaja a los locales a 1:16. El partido estaba sentenciado, pero a costa de que los españoles las pasaran canutas, un avance de lo que les espera en esta segunda fase.
Horas antes, en Moscú, el partido entre el CSKA y el Unicaja resultó bastante igualado y se decantó a favor de los rusos gracias a la calida de Ramunas Siskaukas y Trajan Langdon, que anotaron 23 y 19 puntos, respectivamente. A pesar del favoritismo del CSKA, el Unicaja plantó batalla en los dos primeros cuartos, pero aún no ha podido ganar a los rusos en las siete ocasiones en las que se han enfrentado ambos equipos. Con el escolta estadounidense Juan Dixon mostrándose como un jugador resolutivo desde la línea exterio r y el pívot escocés Robert Archibald haciendo gala de su superioridad en ambas zonas, los cajistas se mantuvieron en el encuentro sin excesivos problemas. Sólo algunos errores le impidieron irse al descanso con ventaja.
A excepción de un comienzo arrollador del CSKA (19-9, m.9), el Unicaja supo tener un balance positivo entre el aspecto defensivo y ofensivo, con Dixon y el alero checo Jiri Welsch, que lograron puntos interesantes e importantes, con el marcador en 30-30 (m.17) y 37-37 (m.19). El equipo ruso también tuvo a sus tiradores infalibles como Trajan Langdon, que acabó con 11 puntos el primer tiempo. El CSKA quiso evitar sorpresas y basó todo su juego en Langdon y Siskauskas, olvidándose del juego interior, aunque con estos dos jugadores consiguió la máxima diferencia (65-54, m.29).
El Unicaja tenía muchos inconvenientes para frenar a los tiradores y tampoco su juego era fluido y dinámico, bajando con respecto a los dos primeros cuartos, aunque tuvo un acercamiento mínimo (58-54, m.27), que finalmente fue dilapidado por el empuje de los locales.
La calidad de Langdon definió el encuentro a favor del CSKA. Un triple del estadounidense dejó sentenciado el partido (85-78, m.39), cuando el Unicaja había remontado una diferencia de nueve puntos con otro lanzamiento de 6,25 del base montenegrino Omar Cook.