L D (EFE) La formación serbia, que todavía no conoce la victoria en la Euroliga y dispone de la plantilla más joven de toda la competición, salió con mucha ambición y sorprendió al Unicaja, que acumuló seis puntos de desventaja en los diez primeros minutos (16-22).
Sin embargo, el conjunto malagueño, sustentado en los triples de Jorge Garbajosa y el francés Stephane Risacher, dio la vuelta al marcador a tres minutos del descanso (31-33). La ventaja visitante aumentó gracias al acierto del internacional español y el Unicaja cerró el tramo con la primera renta sustancial de la tarde en el pabellón Pionir (34-42). Además, de Garbajosa, el puertorrriqueño Daniel Santiago llevó a cabo un gran labor dentro de ambas zonas. Asimismo, el Unicaja firmó un excelente once de veinticinco en triples.
Pero el rendimiento del cuadro andaluz descendió en el tercer periodo. Los diez puntos de renta que había establecido (39-49 m.23) desaparecieron ante un Partizan cada vez más convencido de estrenar su casillero de victorias, una posibilidad que continuaba abierta al final del cuarto (59-59). El Unicaja, no obstante, recobró la intensidad, volvió a ponerse en manos de Garbajosa y también de Walter Herrmann, quienes acabaron con las esperanzas serbias desde el arco de 6,25 metros.
Sin embargo, el conjunto malagueño, sustentado en los triples de Jorge Garbajosa y el francés Stephane Risacher, dio la vuelta al marcador a tres minutos del descanso (31-33). La ventaja visitante aumentó gracias al acierto del internacional español y el Unicaja cerró el tramo con la primera renta sustancial de la tarde en el pabellón Pionir (34-42). Además, de Garbajosa, el puertorrriqueño Daniel Santiago llevó a cabo un gran labor dentro de ambas zonas. Asimismo, el Unicaja firmó un excelente once de veinticinco en triples.
Pero el rendimiento del cuadro andaluz descendió en el tercer periodo. Los diez puntos de renta que había establecido (39-49 m.23) desaparecieron ante un Partizan cada vez más convencido de estrenar su casillero de victorias, una posibilidad que continuaba abierta al final del cuarto (59-59). El Unicaja, no obstante, recobró la intensidad, volvió a ponerse en manos de Garbajosa y también de Walter Herrmann, quienes acabaron con las esperanzas serbias desde el arco de 6,25 metros.