L D (EFE) El Tour lamenta la baja del líder del ONCE-Eroski, un corredor que veía este año la carrera de forma diferente. Prometió asaltar el poder absoluto de Armstrong y lo intentó en Alpe D´Huez, donde el tejano se puso de líder "en un día con malas sensaciones" y sin la demostración de 2001. Fue un síntoma que se salía del guión. Un día después se repetía la historia en el pequeño puerto de La Rochelle. Beloki volvió a la carga. Mandaba otro aviso al tetracampeón del Tour, pero en el descenso se acabaron las ilusiones del principal jefe de la oposición tras perder el control de la bicicleta e irse al suelo con resultado de tres fracturas.
A pesar del drama de Beloki el Tour no ha salido resuelto de los Alpes, y eso añade interés. Armstrong no descansa con una renta de minutos como en anteriores ediciones. Sólo 21 segundos al kazako Vinokurov y 1:02 al español Iban Mayo, un corredor a tener muy en cuenta y que ya ha hecho sudar a Armstrong en la pasada Dauphiné. El Tour del centenario se presenta abierto en vísperas de una contrarreloj de 47 kilómetros que se disputará el viernes y que puede aclarar quienes son los candidatos definitivos al podio. Pero después llegan los Pirineos con tres etapas que incluyen dos finales en alto, uno de ellos en Luz Ardiden, donde el ambiente será propicio para que Mayo intente repetir la gesta de Alpe D´Huez.
Todas las combinaciones son posibles. Armstrong tiene una buena oportunidad para encauzar su quinto Tour y decretar el k.o. de todos sus rivales. O podría salir k.o. él mismo si los Vinokurov, Mayo con el Euskaltel en gran momento, Hamilton, Mancebo con el iBanesto.com, Ullrich, e Ivan Basso deciden lanzar una traca de ataques contra el jefe y hacen sonar la flauta. El Tour descansó después de una primera fase que tuvo como dominador al italiano Alessandro Petacchi, ya en casa con cuatro victorias de etapa y una segunda alpina donde Iban Mayo se doctoró entre los grandes. "Iré paso a paso sin renunciar a nada, pero el favorito es Armstrong", aclara.
Los equipos españoles salieron a entrenar en un día menos caluroso pero de bochorno dos horas de rodaje suave. Las fuerzas ya van decayendo y la mejor recuperación se basa en una buena siesta y la visita de familiares y amigos. Los favoritos tienen una cita clave en la contrarreloj del viernes entre Gaillac y Cap Decouverte, en la que quedará despejada la incógnita del estado de Armstrong, quien sigue siendo el rey mientras alguien no demuestre lo contrario. Después llegarán los Pirineos con tres etapas terroríficas, donde sobrarán las dificultades y escenarios apropiados para el gran desafío del año. Las páginas del Tour del centenario están abiertas para recibir al héroe del quinto título consecutivo... o al héroe que lo impide. Al menos este año cabe la incertidumbre. Eso que gana la mejor carrera del mundo.
Este jueves se disputará la undécima etapa entre Narbona y Toulouse, de 153,5 kilómetros. Una sola dificultad de tercera categoría, la Cota de Saissac, de tercera categoría y el resto es propicio para que vuelvan las escapadas o los esprinters. Los favoritos se van a reservar para la cronometrada del viernes. Ahí se la van a jugar.
A pesar del drama de Beloki el Tour no ha salido resuelto de los Alpes, y eso añade interés. Armstrong no descansa con una renta de minutos como en anteriores ediciones. Sólo 21 segundos al kazako Vinokurov y 1:02 al español Iban Mayo, un corredor a tener muy en cuenta y que ya ha hecho sudar a Armstrong en la pasada Dauphiné. El Tour del centenario se presenta abierto en vísperas de una contrarreloj de 47 kilómetros que se disputará el viernes y que puede aclarar quienes son los candidatos definitivos al podio. Pero después llegan los Pirineos con tres etapas que incluyen dos finales en alto, uno de ellos en Luz Ardiden, donde el ambiente será propicio para que Mayo intente repetir la gesta de Alpe D´Huez.
Todas las combinaciones son posibles. Armstrong tiene una buena oportunidad para encauzar su quinto Tour y decretar el k.o. de todos sus rivales. O podría salir k.o. él mismo si los Vinokurov, Mayo con el Euskaltel en gran momento, Hamilton, Mancebo con el iBanesto.com, Ullrich, e Ivan Basso deciden lanzar una traca de ataques contra el jefe y hacen sonar la flauta. El Tour descansó después de una primera fase que tuvo como dominador al italiano Alessandro Petacchi, ya en casa con cuatro victorias de etapa y una segunda alpina donde Iban Mayo se doctoró entre los grandes. "Iré paso a paso sin renunciar a nada, pero el favorito es Armstrong", aclara.
Los equipos españoles salieron a entrenar en un día menos caluroso pero de bochorno dos horas de rodaje suave. Las fuerzas ya van decayendo y la mejor recuperación se basa en una buena siesta y la visita de familiares y amigos. Los favoritos tienen una cita clave en la contrarreloj del viernes entre Gaillac y Cap Decouverte, en la que quedará despejada la incógnita del estado de Armstrong, quien sigue siendo el rey mientras alguien no demuestre lo contrario. Después llegarán los Pirineos con tres etapas terroríficas, donde sobrarán las dificultades y escenarios apropiados para el gran desafío del año. Las páginas del Tour del centenario están abiertas para recibir al héroe del quinto título consecutivo... o al héroe que lo impide. Al menos este año cabe la incertidumbre. Eso que gana la mejor carrera del mundo.
Este jueves se disputará la undécima etapa entre Narbona y Toulouse, de 153,5 kilómetros. Una sola dificultad de tercera categoría, la Cota de Saissac, de tercera categoría y el resto es propicio para que vuelvan las escapadas o los esprinters. Los favoritos se van a reservar para la cronometrada del viernes. Ahí se la van a jugar.