(Libertad Digital) Osasuna y Sevilla se atascaron en un empate sin goles en el Reyno de Navarra. Los locales llevaron el peso del partido y merecieron la victoria pero acusaron la falta de precisión en la primera parte, en la que llegaron a poner a los de Manolo Jiménez contra las cuerdas.
Dueño del balón, Osasuna llevó el peligro por medio Pandiani, y de Javier Flaño, quien en un centro-chut estrelló el balón en el larguero. Los rojillos reclamaron un penalti por empujón de Konko a Pandiani, pero las ocasiones eran salvadas por un Sevilla que se conformó con un tiro suave de Renato sin problemas para Ricardo, que jugó su primer partido tras casi seis meses de suplencia.
En la segunda mitad, volvió a empujar ante un Sevilla a la expectativa que intentó tomar aire con la salida de Jesús Navas y Capel. Los de Camacho dispusieron de nuevas ocasiones, pero siguieron sin encontrar el acierto de cara al gol. Al final, el Sevilla se pudo llevar el encuentro tras generar tres buenas aproximaciones de Capel y Luis Fabiano que llevaron el miedo a una afición que se ve condenada a sufrir hasta el desenlace del campeonato.
Por su parte, el Deportivo salvó 'in extremis' un punto ante el Getafe (1-1), un resultado con el que da un paso atrás en sus aspiraciones europeas, frente a un rival al que el empate no le sirve para respirar con tranquilidad, ya que tendrá que seguir batallando por evitar el descenso.
A los gallegos les faltó ambición en el tramo inicial del encuentro, en el que el Getafe, les quitó la iniciativa. Pese al avance de los madrileños, el Deportivo apenas se sintió intmidado.
Los madrileños perdieron a Casquero por lesión antes del primer cuarto de hora, pero no rebajaron sus pretensiones iniciales y mantuvieron el dominio sobre los gallegos. El conjunto de Miguel Ángel Lotina se levantó en los últimos diez minutos de la primera parte, en los que trataron de adelantarse, sin éxito, por medio Lafita,Verdú y Bodipo.
El Getafe obtuvo la recompensa a su insistencia transcurridos sólo treinta segundos de la segunda parte, tras un centro de David Cortés que cabeceó Soldado en el área pequeña. El Deportivo, consciente de que el tanto frenaba sus aspiraciones europeas, intentó reaccionar, pero no se encontró cómodo, ya que el equipo entrenado por Míchel cerró huecos en defensa, evitó las acometidas del rival y e incluso pudo sentenciar al contragolpe en un mano a mano de Uche con Aranzubia a falta de siete minutos para el final.
Los gallegos no perdonaron el error del nigeriano y equilibraron el partido tres minutos después, con una jugada que nació de las botas de Juan Carlos Valerón, y que acabó en las de Riki, quien aprovechó el rechace de Ustari para salvar un punto para el equipo coruñés.